El PP de Pájara exige que se cumpla la ordenanza de ruidos en el municipio




·                Los vecinos denuncian que camiones cargan y descargan frente a sus viviendas y no les permiten el descanso
·              “La actividad económica debe ser compatible con los horarios de descanso de los vecinos”,

1 de febrero de 2019.-  El Comité Local de Pájara defiende el derecho al descanso de los vecinos de la Calle Lope de Vega en Morro Jable que denuncian que la entrada y salida de camiones genera provoca ruidos continuos, genera una gran cantidad de polvo que el viento  que afecta a viviendas y al propio instituto. “Los vecinos denuncian no sólo trastornos del sueño sino también de salud pues afecta directamente a los mayores, niños y aquellos que sufren alguna enfermedad respiratoria crónica”, denuncia el vicesecretario político de Pájara, Gustavo Rodríguez.

Para Rodríguez “es necesario hacer compatible la actividad empresarial con el derecho de los ciudadanos a que el impacto de dicha actividad sea lo menos molesto posible para ellos y sus hijos. Y eso se consigue aplicando la Ordenanza Reguladora de Medio Ambiente contra el ruido del Ayuntamiento de Pájara”, asegura.

Una actividad que los vecinos aseguran que se desarrollada desde las 7:00 hasta las 19:00 horas de la tarde a escasos metros de las viviendas. Hace meses que el Partido Popular de Pájara recibe las quejas de vecinos del Ciervo, especialmente de los que residen en la Calle Lope de Vega ante el impacto que ocasiona el continuo movimiento de camiones en la zona y maquinaria pesada desde primeras horas de la mañana.

Por su parte, el concejal Domingo Pérez, que elevará esta queja al Ayuntamiento de Pájara, entiende las quejas de los vecinos ya que “hemos comprobado de primera mano que resulta imposible abrir las ventanas de las casas o hacer tareas domésticas tan sencillas como poner a secar la ropa”, denuncia.

Las Viviendas más afectadas ya estaban construidas cuando se dio inicio a la actividad, por eso no entienden como se permitió tan cerca de las casas y bajo qué tipo de licencia y uso se trabaja en estos terrenos. “El derecho al descanso debe ser compatible con la actividad económica”, defiende Pérez, “y eso sólo se consigue con el estricto cumplimiento de las normativas vigentes”.