Empresarios de La Palma ,Tenerife y Fuerteventura, los más optimistas de Canarias ,herreños los más pesimistas
31 de enero de 2017 (12:51 h.)
Santa Cruz de Tenerife 30/01/2017.-
La buena marcha de la economía canaria en 2016, lleva a que los
empresarios de todas las Islas se muestren optimistas. Destaca la
confianza empresarial del tejido productivo de La Palma, con 142 puntos,
que se coloca diez puntos por encima de la media regional (134),
seguidos de los empresarios tinerfeños (139) y majoreros (137).
Igual
nivel de confianza expresa los empresarios de La Gomera y Lanzarote
(134), mientras los de Gran Canaria (129) se muestran más cautelosos y
los de El Hierro (119) continúan registrando la moral más baja del
conjunto del empresariado canario.
Estos
son algunos de los resultados que muestra el Indicador de Confianza
Empresarial (ICE) canario, correspondiente al IV trimestre de 2016 y
Perspectivas Económicas I trimestre 2017, elaborado por las Cámaras de
Comercio de Canarias, a partir de la publicación del Instituto Canario
de Estadística (ISTAC).
Los
buenos resultados empresariales alcanzados durante el último trimestre
de 2016 y unas perspectivas de negocio positivas para el comienzo de
2017, colocan a Canarias como la tercera comunidad autónoma más
optimista de todo el territorio español.
Con
un ICE del 1,5%, el tejido productivo del Archipiélago solo es superado
por el de Aragón (2%) y la Comunidad Valenciana (2,1%). En este
sentido, Canarias fue la tercera comunidad con mayor crecimiento de esta
confianza empresarial.
Del
informe de las Cámaras de Comercio de Canarias destaca también cómo las
previsiones de negocio de los empresarios canarios se han mantenido en
terreno positivo en 2016. Así, a lo largo de cuatro trimestres
consecutivos, las expectativas sobre los resultados de sus compañías
siempre se han mostrado favorables.
Concretamente,
el 85% de los gestores de establecimientos empresariales considera que
mantendrá o mejorará los resultados de su negocio en el primer trimestre
de 2017. Solo un 14,9% opina que podría empeorar respecto a los últimos
meses del pasado año.
En
cuanto a los resultados obtenidos en el último trimestre de 2016, casi
un 30% de los empresarios de las Islas mantiene una opinión positiva
sobre el crecimiento de las ventas en su negocio, un dato cerca de 9
puntos por encima de lo que expresan sus homónimos nacionales, dónde
solo un 21,6% confiesa haber alcanzado resultados positivos.
Coyuntura favorable
Para
las Cámaras de Comercio de Canarias esta mejoría generalizada del
optimismo que expresa el empresariado canario es producto del mejor
ejercicio económico que ha registrado Canarias desde que estalló la
crisis, incentivado especialmente por un crecimiento histórico del
sector turístico, y la evolución favorable del resto de los sectores de
actividad.
Asimismo,
destacan que los empresarios canarios se han beneficiado también de la
reducción de los tipos de interés, los bajos precios de petróleo, la
inestabilidad e inseguridad de otros destinos turísticos, que han
permitido un repunte de la actividad de las empresas. Añaden, además,
que la evolución de la economía ha permitido un crecimiento importante
de la población ocupada en Canarias que era en el cuarto trimestre de
2016, de 826.300 personas, mientras que a finales de 2015 alcanzaba las
793.500, lo que ha servido de espuela al crecimiento de la demanda
interna y, por tanto, del consumo.
Crecimiento más discreto
No
obstante, las instituciones camerales también apuntan a que el
crecimiento económico de Canarias en 2017 será más discreto ante la
incertidumbre que causan algunas cuestiones como el Brexit y el impacto
de políticas internacionales de países estratégicos en la economía
mundial, a las que hay que sumar la inestabilidad de los países
productores del petróleo, entre otros factores.
Ante
este escenario, las Cámaras de Comercio reiteran la necesidad de que
Canarias mantenga una agenda política definida y estable que marque las
pautas de una acción económica dirigida tanto a estimular la inversión
de las empresas y a conseguir una mayor financiación del Estado para
resolver los déficits históricos del Archipiélago.
Optimismo generalizado
El
ICE de las Cámaras de Comercio también recoge la evolución del
optimismo empresarial en cada uno de los sectores que aglutina la
economía de Canarias. La confianza aumenta prácticamente en todos los
sectores, salvo en el industrial que experimenta un leve retroceso del
0,6% en este trimestre.
Llama
la atención, el repunte de la confianza que registra la construcción,
que ha sido el sector donde el impacto de la crisis ha sido más grave.
El 70% de sus empresarios confía en mantener o mejora su actividad
frente a un 30% que aún se muestra pesimista sobre la evolución del
sector en los primeros compases de 2017.
Sin
ningún género de dudas, el sector turístico de Canarias es el que mejor
nivel de confianza presenta con unos resultados y expectativas que lo
avalan. Cerca del 50% de los empresarios afirmó haber mejorado su
actividad durante los últimos meses del año y un 41% cree que seguirán
creciendo en los primeros compases de 2017.
También
se muestran optimistas los empresarios del comercio tras los buenos
resultados de la campaña navideña, que se traducen en un incremento del
ICE del 1,1%. El 55% confiesa que ha mantenido las ventas de su negocio,
mientras un 31% señala crecimientos en su cuenta de resultados. Tan
solo un 14% que experimentó un retroceso de las mismas. Los primeros
meses de 2017 también se afrontan con optimismo, tal y como se deduce
del 62% de respuestas que afirman estabilidad.
Por
su parte, la industria a pesar de ser el único sector con un leve
retroceso en su nivel de confianza respecto al trimestre anterior,
consigue ir consolidando la estabilidad en sus resultados. Así lo afirma
el 73% de los empresarios en sus expectativas para el comienzo de año.
Tanto en los resultados alcanzados como en las previsiones, la
diferencia entre respuestas optimistas y pesimistas es positiva.
En
cuanto a las actividades englobadas dentro de otros servicios, la
estabilidad marca su evolución durante el último trimestre de 2016.
Empresas muy dependientes de la demanda interna y cuyos resultados
durante los últimos meses del año arrojan un saldo positivo de 12 puntos
(el doble que hace un año), que se refuerza con un porcentaje de
respuestas de estabilidad del 64%. Las expectativas a corto plazo
mantienen la prudencia con un aumento de la estabilidad (66%).
Factores que limitan la actividad de las empresas
La
debilidad de la demanda se coloca como el principal hándicap que tienen
las empresas canarias para el desarrollo de su actividad, seguido del
incremento de la competencia, las dificultades de financiación y la
escasez de personal cualificado.
Así,
en 2013 la debilidad de la demanda era para 84,7% de los empresarios
canarios el principal factor que condicionaba su actividad mientras que,
en el último trimestre de 2016, preocupa a un 57,3%, un descenso que se
explica por el aumento del consumo de residentes y turistas, el
incremento de la contratación y una mejoría general de la economía.
El
acceso al crédito es otra de las variables que ha ido mejorando de
forma sustancial. Hace cuatro años, el 57% de los empresarios confesó
dificultades para acceder a la financiación externa, mientras que en el
último trimestre de 2016 eran menos del 30%.
La
recuperación de la economía también incide en el peso que ahora dan los
empresarios al incremento de la competencia, que era en 2013 uno de los
condicionantes señalados por el 39,3% de los empresarios y que hoy
preocupa el 50% del tejido productivo.
Otro
condicionante de la actividad empresarial que ha ido cogiendo fuerza
son las dificultades que tienen los empresarios para encontrar personal
cualificado. Un 14,4% declara que tiene problemas a la hora de
seleccionar perfiles profesionales que se ajusten a su oferta de
trabajo, un 5,9% más que a comienzos de 2013.
Comportamiento sectorial
El
informe de las Cámaras de Comercio de Canarias también analiza los
límites a la actividad empresarial por sectores. Los constructores
siguen apuntando la debilidad de la demanda (70%) y las dificultades de
financiación (49%) como los principales frenos a su negocio
Por
su parte, la mayor actividad comercial se aprecia en el aumento de la
competencia como factor limitador dentro del sector. En el último año,
éste ha crecido en importancia un 4,6% afectando al 60% de las empresas
lo que, comparativamente con el peso que tenía a comienzos del año 2013,
ha supuesto un incremento del 36,6%.
Las
dificultades de financiación y la debilidad de la demanda recortan
importancia como factores limitadores de la actividad industrial. En el
caso de la demanda pasa de ser una limitación para el 73,3% de las
empresas en enero de 2016, a un 57,3% en enero de 2017.
El
único factor que no ha perdido peso como factor limitador de las
empresas de transporte y hostelería ha sido el de dificultad para
encontrar personal cualificado para cubrir determinados puestos de
trabajo. De hecho, este ha crecido un 12,7% en el último año y cerca de
un 70% en los últimos cuatro años.
Las
empresas de “otros servicios”, muy dependientes del comportamiento de
la demanda, perciben una recuperación, ya que, si en enero de 2013 el
76% de las mismas apuntaba este factor como limitador de su actividad,
en enero de 2017 éste alcanza al 53,4%. Del mismo modo han visto mejorar
las condiciones financieras que pasan de limitar al 55% de las empras
en 2013 al 26,7% en 2017.
Las
empresas de Otros Servicios han notado una recuperación de la demanda
en el último año reduciéndose esta limitación algo por encima de un 11%.
Sin embargo, más de la mitad de las empresas agrupadas en este grupo
cree que aún sigue débil (57,7%), afectando a las posibilidades de
crecimiento de su actividad