En Fuerteventura devuelve la libertad a un guirre que había sufrido un perdigonazo en un ala y una aguililla accidentada


La Consejería de Medio Ambiente del Cabildo de Fuerteventura, que dirige Natalia Évora, devolvió a la libertad a un guirre adulto (Neophron pernocteropus majoriensis), recuperado de la herida de un tiro en un ala el pasado mes de mayo.


La jornada permitió también devolver a la libertad una aguililla (Buteo buteo) que igualmente había sido encontrada muy débil y fue atendida en el Centro de recuperación de Fauna de Tafira. Precisamente, el veterinario Pascual Calabuig, responsable del equipo de recuperación de fauna, aprovechó la jornada para impartir explicaciones prácticas sobre el cuidado de aves accidentadas en el marco de un curso de formación que viene impartiendo a personal de Medio Ambiente, vigilantes, agentes de Medio Ambiente y técnicos.

Natalia Évora recordó que el guirre “fue encontrado por un vecino de Villaverde el pasado mes de mayo y presentaba un perdigonazo en un ala. El animal estaba muy débil, con un ala muy dañada. Actualmente tenemos contabilizadas 41 parejas reproductoras en Fuerteventura, tres más que el año pasado, además de los ejemplares juveniles. Es la primera vez en los últimos años que se registra un crecimiento tan importante, lo que viene a demostrar que pese a sucesos puntuales como este animal, la concienciación sobre la importancia de protegerlos va creciendo en nuestra sociedad”.
Por su parte, Pascual Calabuig insistió en que “hay que luchar contra los desaprensivos que intencionadamente persiguen estos animales. Recordemos que en este caso no cabe la excusa del error o la confusión. En mayo, que fue cuando se le disparó, no hay ningún tipo de actividad cinegética, y con el añadido de que es en plena época reproductora, por lo que probablemente al disparar a este animal se estaba condenando también las posibilidades de supervivencia de sus crías. Afortunadamente, el trabajo de recuperación ha sido muy satisfactorio, el ala está plenamente recuperada y puede volar con normalidad”
El guirre o alimoche canario, es una especie considerada en peligro de extinción y que hasta hace décadas habitaba en prácticamente todas las islas, aunque actualmente solo se conserva en zonas puntuales de Lanzarote y en Fuerteventura. El guirre es la única ave rapaz carroñera de Canarias, la gran mayoría de sus ejemplares se encuentran en Fuerteventura. Con respecto al aguililla, está reconocida en la categoría de Interés Especial y recogida dentro del catálogo Nacional de Especies Protegidas.
La actual normativa vigente establece que la perturbación, muerte, captura o retención intencionada de cualquier especie silvestre se considera sanción administrativa grave, lo que puede acarrear a los infractores multas de hasta 200.000 euros en caso de que estas infracciones se produzcan en época de reproducción y crianza, o en su trayecto de regreso hacia los lugares de cría en el caso de las especias migratorias.