Fuerteventura.- CC reclama agilidad en la tramitación de licencias de pesca recreativa para evitar la actual saturación



- Las colas de usuarios se repiten en Puerto del Rosario, Gran Tarajal y Morro Jable.

17.06.2020

La falta de gestión política del consejero de Agricultura, Ganadería y Pesca del Cabildo de Fuerteventura, Marcelino Cerdeña, está generando largas colas y muchas esperas a los usuarios que pretende tramitar las licencias de pesca recreativa. 

Actualmente el Cabildo sólo tiene asignadas a tres personas para poder hacer esta gestión en toda la isla de Fuerteventura: dos en Puerto del Rosario y uno en Gran Tarajal. 

Las oficinas de atención al ciudadano de Morro Jable y Corralejo sólo recogen documentación, ya que la Consejería no las ha habilitado para hacer la tramitación.

Desde Asamblea Majorera-Coalición Canaria ya se advirtió de esta problemática al consejero desde el pasado mes de mayo, al recoger las quejas de quienes tenían que hacer largas colas para este trámite. Marcelino Cerdeña respondió entonces que era algo puntual y sin importancia.

Sin embargo, las colas no sólo se han mantenido, sino que aumentan. Desde AM-CC no entiende cómo sólo tres trabajadores de Extensión Agraria del Cabildo de Fuerteventura tienen las autorizaciones para realizar las licencias de pesca a lo largo de toda la isla de Fuerteventura. 

Y a ello hay que añadir el incremento de incidencias sin resolver que se están acumulando en la gestión diaria de la Consejería, principalmente ocasionada por la falta de gestión política para el correcto funcionamiento.

“Es necesario habilitar y dotar de las claves necesarias a todo el personal administrativo de las extensiones agrarias de Gran Tarajal y Puerto del Rosario y oficinas de atención al ciudadano de Corralejo y Morro Jable, para agilizar estos trámites y no sobrecargar siempre al mismo personal, coordinando la emisión de licencias de pesca en toda Fuerteventura”, plantea David de Vera.

AM-CC considera que la división de funciones y competencias entre Marcelino Cerdeña, que es quien figura como consejero, y Sergio Lloret, que es quien realmente firma y autoriza, acaba afectando al normal funcionamiento de la Consejería, ralentizando los trámites y complicando cualquier toma de decisión.