Fuerteventura.- Clavijo anuncia la actualización de la situación de emergencia a nivel de alerta decretado por el Comité Asesor del PECMAR en Gran Tarajal



      Los trabajos a partir de ahora se concentrarán en las labores de extracción de las embarcaciones y la maquinaria, mientras se mantienen el plan de biorremediación



El presidente del Gobierno de Canarias, Fernando Clavijo, ha anunciado  en Gran Tarajal que  el Comité Asesor del PECMAR  ha decidido en la tarde de hoy  actualizar la situación de emergencia a  nivel de alerta en el puerto.


Asimismo, el presidente del Ejecutivo canario ha dado un plazo de sesenta días para que  la remoción de las seis embarcaciones que quedan hundidas sea finalizado. No obstante, Fernando Clavijo  informó que “una vez que concluya el plan de biorremediación con el uso de cultivos biológicos para eliminar los restos de gasoil e hidrocarburos, se pondrá en marcha un programa de vigilancia medioambiental en Gran Tarajal que durará un año, para vigilar posibles afecciones en el hábitat”.


Por otra parte, después de estos sesenta días, se acometerán las medidas necesarias para la dinamización económica de Gran Tarajal, y más específicamente de su puerto, y se efectuarán todas las acciones previstas en base al Decreto de ayudas aprobado recientemente por el Consejo de Gobierno, “un punto de inflexión para  la recuperación del entorno”, afirmó el presidente, quien aprovechó para agradecer “tanto a los técnicos como a todos los voluntarios, entre ellos, a los pescadores por la colaboración en los trabajos todos estos días”


El Comité Asesor del PECMAR celebrado esta tarde en Gran Tarajal, estuvo presidido  por Fernando Clavijo y participaron la consejera de Política Territorial, Sostenibilidad y Seguridad, Nieves Lady Barreto; el vicepresidente del Gobierno de Canarias, Pablo Rodríguez; el presidente del Cabildo de Fuerteventura, Marcial Morales; la viceconsejera de Medio Ambiente, Blanca Pérez; el director general de Puertos Canarios, Manuel Ortega, y el alcalde de Tuineje, Sergio Lloret.

Los responsables de las distintas administraciones intervinientes, junto a los técnicos en materia medio ambiental, portuarios y de seguridad, acordaron esta bajada de nivel en base a la situación actual donde ya se ha superado la primera etapa de contención para evitar una catástrofe natural y se desarrollan con normalidad y sin incidentes los planes de biorremediación y de extracción de embarcaciones y material del muelle.

Marcial Morales, presidente del Cabildo majorero, destacó el cumplimiento del Gobierno de Canarias en no escatimar medios para devolver al Puerto de Gran Tarajal a la normalidad. Por otra parte, Morales aseguró: “Desde el Cabildo y en estrecha colaboración con el Ayuntamiento de Tuineje y el Gobierno de Canarias tenemos una hoja de ruta marcada para que los cuatro muelles de Fuerteventura, con especial atención en Gran Tarajal, tengan un impulso que en cada caso se concrete con distintas actuaciones”.

Fases de trabajo en Gran Tarajal

En el puerto de Gran Tarajal se encontraba atracada una flota compuesta por 3 remolcadores y seis pontonas cargadas con maquinaria, combustibles y materiales de construcción.

A primera hora del día 28, con todo el Archipiélago en situación de alerta por fenómenos costeros declarada por la Dirección General de Seguridad y Emergencias del Gobierno de Canarias, se tiene conocimiento del hundimiento de una gabarra debido a la acción de mar. A las 11:00 horas, el Gobierno de Canarias activa el Plan Específico de Contingencias por Contaminación Marina Accidental (PECMAR) en nivel 2 y convoca al Comité Asesor que, ese mismo día, mantuvo dos reuniones para establecer las primeras medidas a tomar.

Activado el PECMAR, la viceconsejera de Medio Ambiente del Gobierno de Canarias, Blanca Pérez, se desplazó a Gran Tarajal desde donde ha ejercido su labor como directora del Plan.

En dichas reuniones, en las que participa el Cabildo de Fuerteventura y el Ayuntamiento de Tuineje, Puertos Canarios informa de que la flota contiene un total de 147 toneladas de gasoil, que en su mayoría está en tres gabarras y que no consta que porten otros productos tóxicos.

Las malas condiciones del mar impiden que el personal de Puertos Canarios refuercen las amarras del resto de embarcaciones y el 1 de marzo, salvo una pontona, todos los demás barcos han embarrancado, varado, hundido o presentan vías de agua.

A la vez que se producen los daños se detecta una importante contaminación de manchas oleosas y basura de los barcos que, debido al fuerte oleaje y el viento, queda confinada dentro del puerto, detectándose manchas muy ligeras y pequeñas en mar abierto.

Aunque los trabajos de contención y descontaminación se mantendrán hasta la finalización de los trabajos, entre los días 2 y 6 de marzo se concentraron las acciones más importantes de eliminación de contaminantes.

Se colocaron 600 metros de barreras flotantes de contención y a través de mantas abosorbentes y métodos de succión de extraen del agua 40 toneladas de hidrocarburos y una cantidad similar de la única pontona que se mantiene a flote.

En ese momento trabajan sobre el terreno medios de Puertos Canarios, Dirección General de Seguridad y Emergencias, Salvamento Marítimo, Cabildo de Fuerteventura y voluntarios de la Cofradía de Pescadores y del Club de Pesca Deportiva Faro de la Entallada. El día 3 se incorpora la Armada con un buque de Acción Marítima con material de contención y descontaminación y una unidad de buzos que han realizado el sellado de fugas, la colocación de una campana sobre una de las pontonas y el mapeo del fondo del puerto con la situación exacta de las barcazas y maquinaria hundidas.

Durante este periodo se redactó el plan de actuación y los documentos para la contratación de las operaciones de extracción de combustible y recuperación de pecios y materiales.

A partir del 7 de marzo, mientras se mantiene  el proceso de descontaminación y limpieza, con vigilancia de barreras, succión de manchas de aceite y dispersión mecánica de manchas en el mar, los trabajos se orientan a la extracción de la carga contaminante contenida en los barcos y la extracción de los barcos y materiales.

Para ello, Puertos Canarios ha realizado dos contrataciones de emergencia. Una para la extracción de combustible, con un plan de trabajo de 20 días que se inicia con la llegada de un barco especial para esta misión el pasado 9 de marzo, y otra para el reflotamiento o corte de pecios y extracción del puerto, que incluye, además de todas las maquinarias, bidones y restos, su limpieza y su transporte hasta la zona habilitada en el Complejo Ambiental de Zurita. Este trabajo se adjudicó el pasado 9 de marzo para ejecutarse en un plazo de 60 días y ya se han extraído varios camiones, retroexcadoras, contenedores y se ha empezado a cortar y desmontar una de las pontonas.

El 11 de marzo de inició el plan de biorremediación con  con la dispersión de microorganismos inocuos que se alimentan de hidrocarburos. Se han repartido 5.000 litros de inóculo en  por la rampa y las paredes verticales del muelle y, con la ayuda de una embarcación, por la zona exterior y la escollera. La mejoría en la limpieza del agua se hizo evidente en las primeras 12 horas.