Invidente alemán Thorsten Veldenzer, “impresionado y contento de que haya gente con tanta sensibilidad en Fuerteventura”
01 de octubre de 2017 (10:26 h.)
Este
ciudadano alemán es invidente y tuvo que cancelar su viaje a la isla tras
enfermar su perro guía
Patronato
de Turismo y la cadena R2 le extendieron una invitación para visitar
Fuerteventura
30
de septiembre de 2017
Thorsten Veldenzer ha
podido hoy cumplir el sueño de regresar a Fuerteventura. A las 16. 25 horas
aterrizó en el Aeropuerto majorero un avión de la compañía Condor procedente de
Stuttgart en cuyo interior viajaba el ciudadano alemán que hace unos meses tuvo
que cancelar su viaje a la isla tras enfermar su perro guía.
El infortunio de
Veldenzer se agravó cuando su turoperador le pidió 900 euros por haber
realizado la cancelación. El tema, hoy en los juzgados, generó polémica en
Alemania donde fue seguido con gran expectación por los medios de comunicación
del país.
Más tarde, el Patronato
de Turismo de Fuerteventura y la cadena R2 le invitaron a viajar a la isla y pasar
unos días de vacaciones disfrutando del clima y las playas.
Thorsten Veldenzer fue
recibido hoy por el presidente del Cabildo de Fuerteventura, Marcial Morales,
el director del Hotel R2 Río Calma, Luis Hierro, y el gerente del Patronato de
Turismo, Moisés Jorge.
El ciudadano alemán se
mostró “impresionado y muy contento por estar en la isla y, sobre todo, que
haya personas con tanta sensibilidad para invitarle después de todo lo que ha
sufrido”.
En 2008 visitó
Fuerteventura por primera vez. Quedó encantado y con ganas de volver. Cuando lo
iba a hacerlo su perro guía enfermó y tuvo que aplazar la visita. Asegura que
ha sido “sobre todo el clima lo que más le ha llamado la atención para poder
repetir”.
Tras recibir la
invitación del Patronato de Turismo y de R2 reconoció “haberse sentido
sorprendido porque nunca imaginó que desde Fuerteventura hubieran tenido esta
iniciativa”.
Marcial Morales señaló
que hechos como este “demuestran que Fuerteventura es una isla acogedora y que
quiere tener cero límites para que todas las personas puedan disfrutar de este
paraíso” y agregó que el hecho llevado a cabo desde la isla “corrige la mala
práctica del turoperador”.
Tras atender a los medios
de comunicación, Thorsten Veldenzer, su madre ysu perro guía, Frazier,
caminaron hacia la puerta del Aeropuerto dispuestos a disfrutar de unos días de
vacaciones en Fuerteventura.