La Consejería de Infraestructuras aplica medidas de embellecimiento en la travesía urbana de El Matorral
02 de marzo de 2011 (21:11 h.)
La Consejería de Infraestructuras y Ordenación del Territorio del Cabildo ha iniciado los trabajos que desarrolla el Departamentos de Vías y Obras con el objetivo de rehabilitar la travesía que transcurre a lo largo de la zona urbana de El Matorral, en Puerto del Rosario.
Los trabajos, enmarcados en el Plan de Embellecimiento de Glorietas y Travesías del Cabildo, consisten en primer lugar en la retirada y sustitución de los bordillos de los dos carriles de la travesía, la mediana, y las dos glorietas situadas en ambos extremos de este tramo; a lo que luego seguirá la preparación del entorno para llevar a cabo una posterior acción de embellecimiento dirigida, también desde el impulso de la Consejería de Infraestructuras, a crear un pasillo verde y distintas zonas ajardinadas en esta zona de El Matorral.
Manuel Miranda, consejero del área en la primera institución insular, manifestó que estos trabajos "comenzaron ayer mismo, y está previsto que se extiendan durante las próximas dos semanas. A partir de ahí, comenzarán los trabajos de jardinería que van a permitir ofrecer una imagen renovada en el entorno de El Matorral, un enclave que consideramos importante mantener en las mejores condiciones dado que acoge un volumen de circulación considerable"..
"Además –agregó Miranda-, esta actuación es necesaria teniendo en cuenta que desde el Aeropuerto hasta Puerto del Rosario hay un tramo de paso obligado para todos los turistas que se dirigen al norte de la Isla, y por eso también trabajamos desde la Consejería de Infraestructuras para que la impresión que se llevan sea la mejor posible desde que aterrizan hasta que llegan al lugar en que se hospedan".
Trabajos. Los trabajos que se desarrollan en el entorno de El Matorral están siendo llevados a cabo por un equipo integrado por varios operarios de la Consejería de Infraestructuras, apoyados por un tractor pala y un camión de transporte. La maquinaria se encarga de demoler los antiguos bordillos, que se encontraban deteriorados, y de preparar las zanjas para las zonas ajardinadas, mientras que los operarios se ocupan de la instalación de los nuevos bordillos.