La virtud está en el centro por Domingo Fuentes Curbelo
01 de septiembre de 2015 (18:29 h.)
En el
centroizquierda político, es donde se sitúa la mayoría de los españoles
que están cansados de las mentiras, la corrupción, los recortes, y la
política de austeridad extrema del PP
A medida que se agota la legislatura y se aproximan las
elecciones generales, desde los extremos políticos (PP y Podemos), están tratando
de marcarnos el paso, intentando trazar la hoja de ruta de los socialistas
españoles. No hablan de las propuestas que tienen para sacar a España del
ostracismo, la pobreza y el sufrimiento de centenares de miles de familias. PP, por ejemplo, va de plaza en plaza anunciando que
el PSOE está abocado a un pacto con Podemos, que por lo visto es el diablo redivivo
con cuernos y rabo incluidos, y que eso sería al acabose para España; y los de
Podemos, para no ser menos, dicen que el pacto con el PSOE es algo "contra
natura", con lo cual unos nos sitúan en la izquierda radical (de raíz, no
me lo tomen a mal los más sensibles), y los otros nos ven escorados a la derecha por aquello de
nacieron "para combatir el bipartidismo". Me quedo sin habla.
Al PP ya lo conocemos. Ya hemos soportado el sufrimiento que
han infligido a millones de españoles trabajadores y de clase media en estos
años, al tiempo que han aprobado amnistías fiscales, y han propiciado que las
grandes fortunas se hayan incrementado escandalosamente en España. Pero a los
de Podemos es imposible reconocerlos, porque un día pueden decir una cosa y al
siguiente la contraria. Iglesias, por ejemplo, fue a Grecia a abrazar a Tsipras
con todo su entusiasmo. ¿A quién va a abrazar ahora, a Tsipras o a Varoufakis? ¿En
qué se diferencia el Tsipras promotor del tercer rescate a Grecia, tras el
pronunciamiento inapelable del pueblo griego para no aceptar las condiciones de
la Troika, y el Zapatero que modificó el artículo 135 de la Constitución para
garantizar el pago de la deuda, que tanto nos restriegan por las narices? ¿Qué
hizo éste que no haya hecho aquél, hasta el extremo de ser tachado de traidor
por el que fuera su breve ministro de economía Varoufakis? Bueno... Sí hay una
diferencia, Zapatero no hizo ninguna farsa convocando al pueblo español a un
referéndum, para luego acabar haciendo lo contrario de lo que votó el pueblo.
Visto lo visto, creo que los socialistas españoles vamos en
la línea correcta, centrados, con un programa claro de compromiso de devolver a
los españoles los derechos y las libertades, es decir, el Estado de bienestar
que nos ha arrebatado en solo cuatro años el Gobierno del PP. Un programa para
gobernar España solos, mejor que mal acompañados, porque —tal como establece la
máxima aristotélica— cuando los extremos son viciosos, la virtud está en el
medio. Y ahí, en el centroizquierda político, es donde se sitúa la mayoría de
los españoles que están cansados de las mentiras, la corrupción, los recortes, y
la política de austeridad extrema del PP; así como de la incertidumbre y de la
aventura de Podemos, que, tras el abrazo de Syriza al rescate de la Troika, se
ha quedado sin argumentos. Un programa para acabar con el desempleo y los
contratos precarios, así como para propiciar el retorno de los cientos de miles
de españoles que han tenido que emigrar a otros países en busca de un empleo. Un
programa federal para zanjar la crisis territorial que ha creado el PP con su
política de confrontación, inacción y falta de diálogo. Un programa para profundizar
en la construcción de una Unión Europea más democrática, equilibrada y
solidaria, que dé una respuesta a los inmigrantes que huyen de la guerra y la miseria,
y vienen a la Unión por ser un referente de bienestar.
Por Domingo F. Fuentes Curbelo
Soy canario, de la isla de Fuerteventura. Licenciado en Filología Inglesa. Profesor de IES San Diego de Alcalá de Puerto del Rosario. Socialista. He sido consejero y vicepresidente del Cabildo de Fuerteventura, diputado del Parlamento de Canarias y senador por la comunidad Autónoma de Canarias. Escribo en mis ratos libres y he publicado varios libros (novela y poesía).