Los gemelos de Oasis Park Fuerteventura, hoy cumplen 59 años en el parque que vieron crecer






Vicente y Esteban llevan toda una vida en el parque. Hace más de dos décadas abrió sus puertas Oasis Park Fuerteventura y desde entonces ambos forman parte  de su identidad. Hoy cumplen 59 años rodeados de su familia y compañeros


Vicente es el rostro más feliz que da la bienvenida a todos los turistas. Con su carisma y simpatía se ha ganado a unos visitantes fieles al parque que siempre preguntan por él. Su nombre incluso queda grabado con frecuencia en el libro de visitas de Oasis Park Fuerteventura.


Vicente, unido a los animales


No es de extrañar que hasta los camellos lleven los nombres de los gemelos del parque. Los hermanos siempre han estado en las entrañas de Oasis Park Fuerteventura y se integraron en la granja camellera de la que guardan muy buenos recuerdos. ¿Anécdotas?, muchas. Vicente, por ejemplo, siempre se entregó a los animales e incluso preparaba los biberones de los guelfos como si fueran para sus propios hijos.



Esteban, amante de la jardinería


Esteban, por su parte, ha demostrado una especial habilidad para las labores de jardinería y, allí, en Garden Center Fuerteventura, supervisa la gestión de una gran variedad de plantas, la construcción de jardines públicos y privados así como el asesoramiento de zonas verdes en hoteles. Si algo se puede decir en favor de la trayectoria profesional de ambos es que han desarrollado diversas labores en diferentes áreas de naturaleza. Y es que su instinto de protección sobre la flora y fauna les vino inculcado desde muy pequeños en su casa por sus padres Vicente Cabrera y Rosario Rodríguez en el sur de Fuerteventura, donde se cumplía cada sábado la tradición de ir a limpiar la hermosa playa del Viejo Rey (municipio de Pájara). Así, los once hermanos se desvivían por dar cobijo y mantenimiento a diversas especies de flora y animales como las tortugas marinas, especies que curaban y posteriormente devolvían al mar.


Son muy queridos por el visitante


El parque sigue recibiendo cartas de turistas de diferentes países que visitaron Oasis Park Fuerteventura hace décadas y hoy se interesan por los gemelos. Aquellos mismos visitantes que rara vez distinguían al uno del otro y siempre se preguntaban quién era quién. 


Tal era la complicidad con los turistas que estos incluso los invitaban a países como Suecia, Irlanda, Alemania, para devolverles el gesto que ellos habían tenido en la Isla durante su visita. Es asombroso comprobar cómo el idioma no era una barrera para entenderse con los visitantes de todas partes del mundo. Esteban y Vicente han conseguido algo muy difícil hoy en día, recibir no solo emails sino cartas y fotos de momentos vividos hace más de 20 años. 


Turistas que se preguntan hoy por la salud de aquellos dos jóvenes gemelos que tan bien les recibieron. Porque no solo Vicente y Esteban daban recomendaciones a aquellos primeros visitantes sino que los acompañaban tras su jornada laboral a recorrer la Isla. Era una forma diferente y más cercana de conocer Fuerteventura sin perderse los lugares más salvajes que solo los amantes de la Isla saben ver en el atardecer. La estampa era enternecedora porque los gemelos incluso invitaban a los turistas a una comida familiar de domingo en casa de sus progenitores; ¿por qué no?, para Vicente y Esteban, era algo natural.


Por ello, Oasis Park Fuerteventura se muestra agradecido ante un personal así, que derrocha pasión y afinidad no solo por un centro de conservación de naturaleza –que es y será siempre su casa- sino por amar a su tierra y querer entregarla en su esplendor a todo el que quiera descubrirla por sus valores y tradiciones.


Protagonistas por su día


El mejor lugar de celebración no puede ser otro que Oasis Park Fuerteventura. Por ello la Dirección de parque ha querido tener un gesto de cariño con los veteranos en este día tan especial. Vicente y Esteban también son especiales porque contribuyen a engrandecer el buen clima laboral; siempre arrancan sonrisas.  Pero no solo, los hermanos han demostrado su buen hacer en los buenos y malos momentos. Junto a los compañeros con los que trabajan día a día y de igual a igual, Esteban y Vicente han hecho un paréntesis en su jornada para recibir el cariño de todos y ¡soplar  las velas! ¡Felicidades!