El
diputado del Grupo Nacionalista Canario, Mario Cabrera, ha denunciado esta
mañana en el Parlamento que “se tarde hasta un mes para el traslado de
pacientes cardiológicos desde Fuerteventura hasta su hospital de referencia en
Gran Canaria, el Materno Infantil”. Esta
situación es intolerable, y más cuando existe un protocolo, desde al año 2017,
que establece que se debe dar un máximo de 48 horas para que un helicóptero
traslade a los pacientes. Si
esto no se aplica no es por falta de recursos ni de personal, es por la falta
de organización y dirección del Hospital de Fuerteventura y “el consejero Blas
Trujillo empieza a ser responsable de este caos”. A
ello se une el retraso de la creación de la unidad de hemodinámica, que no ha
avanzado nada en esta Legislatura: “con ella se podría reducir en un 80% los
traslados y mejorar la atención sanitaria”.