Paloma Hernández, candidata al Senado por el PSOE Fuerteventura, escucha las demandas de la población migrante que reside en la isla.





Compromiso en dar respuesta desde la Cámara Alta a todas las necesidades del colectivo en el cumplimiento de sus derechos


La candidata al Senado por el Partido Socialista de Fuerteventura, Paloma Hernández, ha mantenido diversas reuniones con el colectivo migrante de la isla y ha participado en asambleas celebradas en Morro Jable y Puerto del Rosario para conocer de primera mano sus carencias y necesidades, y poder trasladarlas de esta manera al Gobierno.


Entre esas necesidades se encuentra la búsqueda de soluciones a los problemas burocráticos relativos a la regularización de su situación administrativa, así como a la situación de los Menores Extranjeros No Acompañados (MENA), muchos de los cuales al cumplir los 18 años se quedan indocumentados y sin la posibilidad de seguir estudiando.

Además, se han producido casos en los que algunos migrantes han dejado de ser atendidos en los Centros de Salud, vulnerándose el carácter universal del derecho de acceso al sistema sanitario, por lo que se debe apostar por una solución real e inmediata que impida su vulneración.

Por ello, Hernández afirma que “el PSOE tiene su seña de identidad en trabajar para las personas, también para la población migrante, y por ello se compromete a impulsar los Fondos de Desarrollo con las Administraciones Locales y a recuperar la ayuda a la cooperación de los países de origen”, por lo que trasladará desde el Senado todas las necesidades de este colectivo en el cumplimiento de sus derechos.

La candidata al Senado por el Partido Socialista de Fuerteventura también ha estado acompañada en las distintas reuniones con la población migrante por Elena Máñez y Luc André Diouf, candidatos del PSOE Canario al Congreso de los Diputados por la provincia de Las Palmas, quienes también han trasladado su compromiso por volver a recuperar los derechos de este colectivo que habían sido recortados por la derecha, y poder mantener una convivencia real y con garantías de éxito en una sociedad igualitaria.