Cincuentenario de la Muerte del «Che Guevara»: 1967-2017: IV

(«Hasta la victoria siempre ¡Patria o muerte!»)
Ángel Díaz Arenas

1.3.1. Muerte y trasmuerte

            Sin embargo, el Che muerto posee además otra fase postmortal de una cierta poeticidad que implica la presencia de un posible «ángel vengador» y esto ocurre debajo de la imagen y efigie de una mujer. Parece evidente que una parte de las personas que intervinieron directamente en el asesinato del Che Guevara encontraron muerte violenta tiempo más tarde. Algo que normalmente se ignora y que no dicen siempre los libros de historia (aunque existen innumerables documentos, no está comprobado) es que a esta muerte la siguieron dos asesinatos muy precisos: 1) uno, fue el de quien coordinó, dirijió y organizó en gran parte la muerte del Che (él ordenó, por ejemplo, que se lo cortaran las manos) y 2) otro, que implica el asesinato, a su vez, de la persona que se ocupó de planear la muerte del guerrillero. Esto fue mostrado en «Tele 5» el lunes 27 de julio de 2009, a las 3.35 horas de la mañana. Informaciones sobre este programa están presentes en la revista televisiva «TV 14», N° 15, y de la lectura de lo escrito en esta página 17, bajo el título, «Wer war Che Guevaras Rechenengel?»[1] -¿Quién fue el <ángel vengador> del Che Guevara»?-, se aprende que la presunta asesina fue Monika Ertl (1937-1973) que nació y vivió en Bolivia y cuyo padre fue el cineasta (operador) alemán Hans Ertl (1908-2003), a quien ayudó a filmar dos filmes en Bolivia (véase detalle –34-):




Esta Monika (denominada «La Gringa» o bien «Juana») perteneció al ELNB (Ejército de Liberación Nacional de Bolivia) y parece ser que aprendió a disparar como un macho («wie ein Kerl» -35-):




Siendo aparente
mente ella quien se ocupó de buscar al supuesto organizador de dicho asesinato; a saber al Cónsul General de Bolivia en Hamburgo –Roberto Quintanilla Pereira- (36),

y lo asesinó el lunes 1 de abril de 1971. No olvidando el «Equipo Crónica» a este personaje a quien lo retrata (con un título muy esclarecedor y denunciador) en su (37) «Partes de un conjunto» [1973, Colección de Manolo Valdés[2] de Madrid]:



Esta obra es un acrílico sobre lienzo y marco y sus medidas dicen: 140 x 140 cm. Éste pertenece a la serie «Retratos, bodegones y paisajes» y figura en la página 209 del catálogo de Dalmace.  Este retrato posee gran vitalidad y el parecido con el original es casi perfecto; en él se aunan el gesto, tono y el marco que coincide con el título: «Partes de un conjunto», es decir, elementos del crimen; véanse las pistolas y sus partes que forman el fondo del retrato. Obsérvese asimismo una fotografía del momento que representa la escena del cadáver de Inti Peredo[3] en un féretro y este personaje como testigo del muerto al mismo tiempo que fuma indiferentemente un cigarrillo, mientras habla a la prensa (38):



A su vez ella misma fue muerta (parece ser que fue previamente torturada) por la policía secreta boliviana el 12 de mayo de 1973. Así se cierra un capítulo sangriento de la historia de la Humanidad y particularmente de Latinoamérica. Hay un libro sobre ella de Jürgen Schreiber que se titula: Sie starb wie Che Guevara[4] (véase la portada de éste –38-):



4. Palabras finales

            Éste es el fin físico y humano del Che Guevara y algo de su presencia en la obra del «Equipo Crónica»[5], materiales recordados y recuperados con motivo del cumplimiento de los 50 años de su asesinato, cincuentenario y aniversario trágicos que tuvo lugar exactamente el martes 9 de octubre de 2007.
            Importante es tal vez señalar, como colofón de este escrito, un aspecto que raras veces la crítica ha señalado: las historias que el «Equipo Crónica» cuenta como ocurre en los tebeos, cómics o bien El Guerrero del Antifaz, etc. No hay que ver sus imágenes como individualidades, sino más bien como partes formantes de un cuerpo, de una historia; sólo que hace falta rellenar los huecos y espacios vacíos, dando al todo una línea secuencial y cronológica. Esto es lo que acabamos de contar en este escrito llevados de la mano por dicho «Equipo» y en esta despedida del Che Guevara.
            A través de este proceso pictórico ellos muestran su capacidad de narradores, de contadores de historias. Raras veces ha ocurrido algo semejante y en tal extensión y con tanta coherencia e intensidad en el ámbito de la pintura (excepto Goya, tal vez Solana) y es de lamentar que los estudiosos de sus obras no hayan visto (o no siempre resaltado debidamente) ese aspecto, utilizar la imagen pictórica como narración y al hacer esto añadirla una dimensión y un valor más: recuperar, relatar y hacer historia. Recordemos al respecto el famoso verso ocho del poema «Correspondances»[6] («Los perfumes, los colores y los sonidos se responden») de Charles Baudelaire:

                        Les parfums, les couleurs et les sons se réponden.

Esto es algo de lo que acabamos de hacer al realizar este escrito (aunque no hayamos hablado de «perfumes, colores y sonidos») en el que hemos aunado el análisis literario, el biográfico y el histórico, sin olvidar tampoco el de la historia del arte como nos recuerda la presencia nada ingenua de la imagen del «Martirio de San Bartolomé» y su aguda presencia unificadora de dos destinos gemelos en «La noticia».
            Siendo esta historia la que nos ha invitado a volver a ver la efigie del Che y constatar que aunque muerto sigue viviendo. El «Equipo Crónica» lo muestra y demuestra. Léase una frase del artículo «Der Mythos lebt» que dice (cursivas nuestras): «40 Jahre nach seinem Tod ist de Revolutionär jenseits aller Ideologie zur Pop-Ikone mutiert» (“40 años después de su muerte se ha convertido el revolucionario de izquierdas, a pesar de cualquier ideología, en un icono Pop”). Sin olvidar el «Vor 50 Jahren wurde Che Guevara in Bolivien erschossen» (“Hace 50 años fue fusilado el Che Guevara en Bolivia”) de Georg Ismar. No hay nada más que decir y añadir: el Che Guevara está hoy más vivo que antaño.[7] Véase la (39) «imagen de una modelo» que lleva una camiseta roja en cuyo pecho exhibe la silueta auroleada de la cabeza del Che y ahora más roja que nunca:


O bien la presente en el artículo titulado (40) «Che vuelve a ser chic»[8]:



En esta imagen también se le ve sobre un fondo rojo, pero acompañado de una muñeca impasible de goma. Esto aclara el que esta imagen se halle a la venta en una tienda de distribución de utensilios eróticos en Berlín, transformando, de este modo, al Che asimismo en un objeto de esta índole. Y siguiendo esta línea más que de desmitificación de utilizar esta imagen para cualquier fin (el fin justifica los medios) puede mostrarse incluso su efigie heroica usada para hacer reproducciones poco respetuosas, en el contexto histórico, político y biográfico, como la presente en el artículo de Christa Sigg titulado (41) «Duckevara und Mausewitsch:



En este «Pato Donald y Mickimaus» se le ve sobre un fondo rojo cubierto con gorra negra y estrella roja, pero la imagen reproducida dice en su parte inferior «Libertad para los patos.» Y en consecuencia el rostro reproducido no es el del Che, sino el del pato Donald que ahora se llama «Donaldvara». Insistiendo sobre esta actualidad de la imagen del Che señalamos que hace algún tiempo se realizó una exposición en El Palau de la Virreina de Barcelona que se titula: «Che! Revolución y mercado, los usos y abusos de la imagen.»[9] En ésta se reúnen unas 300 piezas con diferentes interpretaciones de la mítica fotografía del guerrillero cubano. En el texto publicado en internet por La Vanguardia puede leerse: «Estandarte de la Revolución Cubana, la efigie de Guevara ha pasado a decorar ceniceros, camisetas, tatuajes, ‘grafittis’, pins o ser objeto de interpretaciones artísticas por creadores de todo el mundo, como refleja la muestra de Barcelona. La exposición, que no es una aproximación a la figura del Che sino un recorrido al uso de su imagen, cuenta con trabajos artísticos de Vik Muniz, Martin Parr, Pedro Meyer, Marcos López, Joan Fontcuberta y José Angel Toirac, entre otros muchos. (...) Trisha Ziff dijo que había elegido el Che para su proyecto de investigación porque es un <fenómeno> y no existe una imagen <tan maleable> que haya sido utilizada en los últimos 40 años de <formas y objetivos tan diferentes>. La comisaria admitió que en la sociedad actual <no hay ninguna imagen sagrada> y que la del Che se ha convertido en <un logo, una marca, un negocio que, de alguna manera, puede explicar la historia del capitalismo>». Recordemos, en este contexto, que incluso el exjugador de fútbol argentino, Diego Armando Maradona (*1960), lleva tatuada su efigie en su hombro derecho (42):
   
     
 





[1] Heinrich Bauer: «Wer war Che Guevaras Rechenengel?», en: TV 14, N° 15, (Hamburg, julio de 2009), pág. 17.
[2] Manuel Valdés Blasco, conocido como Manolo Valdés (Valencia, 8 de marzo de *1942), es un pintor español residente en Nueva York (EE. UU.). Fue el introductor en España de una forma de expresión artística que combina el compromiso político y social con el humor y la ironía. Nació en Valencia el 8 de marzo de 1942. En 1957 se matriculó en la valenciana Escuela de Bellas Artes de San Carlos en la que estuvo dos años, abandonado los estudios para dedicarse a pintar. En 1964 fundó el grupo artístico Equipo Crónica junto con Juan Antonio Toledo y Rafael Solbes en el cual se mantuvo hasta la muerte de Solbes en 1981, aún cuando a los dos años de la fundación del grupo, Toledo lo había abandonado. A la muerte de Rafael Solbes sigue trabajando en solitario en Valencia durante unos años, hasta que en 1989 viaja a Nueva York donde monta su estudio y sigue experimentando con las nuevas formas de expresión. Pertenece a la Galería Marlborough y a la Galería Freites. Monta también estudio en Madrid para la realización de grandes esculturas, alternando la creación en ambas ciudades. Conviene informar que Rafael Solbes (1940-1981) fue un pintor español, miembro fundador del grupo artístico Estampa Popular de Valencia y posteriormente de Equipo Crónica. Se forma artísticamente en la Escuela de Bellas Artes de San Carlos de Valencia, donde conocería a los que serían colegas del Equipo Crónica, Manolo Valdés y Joan Antoni Toledo (1940-95). Durante sus primeros años de producción pictórica, Solbes realizó una obra con tendencia tenebrista-expresionista con cierta carga política e influencia de José Gutiérrez Solana (1886-1945). A finales de 1964, Solbes participó en la creación del Equipo Crónica. Véase «Biografía de Manolo Valdés», en: http://www.biogr afiasyvidas.com/biografia/v/valdes_ manolo.htm.
[3] Éste es Guido Álvaro Peredo Leigue, «Inti», (nacido el 30 de abril de 1938 en Cochabamba, Bolivia y  muerto el  9 de septiembre de 1969, en La Paz) quien fue un político y guerrillero boliviano que integró la Guerrilla de Ñancahuazú bajo el mando de Ernesto Che Guevara en los años 1966 y 1967, donde este último murió. Peredo fue uno de los pocos sobrevivientes. Murió asesinado por las fuerzas de seguridad en 1969.
[4] Jürgen Schreiber (*1947): Sie starb wie Che Guevara. Die Geschichte der Monika Ertl, (Düsseldorf 2009). Artemis & Winkler.
[5] Destinos y obras sobre los que aconsejamos consultar a Paco (Francisco) Alberola: «Biografía y Catálogos del Equipo Crónica», en: Internet, (Barcelona, 8 de junio de 2011).
     [6] Charles Baudelaire (1821-1867): «Correspondances», en: Les fleurs du mal, (Evreux, 1972), pág. 19. Éditeur Adrien Cart. Librairie Larousse.

[7] Como una prueba más de su actualidad véase el film que proyectó la televisión alemana en su cadena Arte el martes (2.10.2007) entre las 22.50 y 1.15 horas y que se titula: «Che Guevara - Der Körper und der Mythos (Ernesto Che Guevara» [Che Guevara - El cuerpo y el mitos (Ernesto Che Guevara)]. La posición de la prensa española y particularmente de El País [(Madrid, martes 9 de octubre de 2007)] es crítica y negativa. Véanse sus dos artículos: 1) M. Vicent: «Cuba aprovecha los actos en homenaje al Che para apoyar los cambios» (pág. 10: ya citado) y 2) Jorge G. Castañeda: «Aniversario del Che» (pág. 17), autor del libro: La vida en rojo rojo. Una Biografía del Che Guevara, (Madrid, 41998). Santillana, S.A. Entre las páginas 238-239 de ésta hay 34 fotografías que, aunque de regular calidad, son buenos documentos plásticos histórico-biográficos. Hace un par de años apareció un libro en Alemania del escritor y director cinematográfico argentino, Eduardo Montes-Bradley (*1960): Ché Guevara - Aufstieg und Fall eines großen Revolutionärs, (München, 2008). Edel Motion. En esta línea bastante negativa y denunciadora de una triste situación real político-social no olvidemos tampoco mencionar algo de la literatura cubana que aborda y denuncia el tema, entre cuyas obras destacamos únicamente la de Zoe Valdés (*1959): La nada cotidiana (1995). Pero a ésta pueden sumarse muchas otras.

[8] «Che vuelve a ser chic», en: Abendzeitung, (Múnich, 14/15 de junio de 2008).
[9] «Che! Revolución y mercado, los usos y abusos de la imagen», en: http://www. lavanguardia.es/lv 24h/20071024/53405426126.html.