Conscientis Fuerteventura : Sergio L. Sánchez “La salud no cotiza en bolsa”
18 de mayo de 2018 (16:36 h.)
El presidente de la Sociedad Canaria de Medicina
Integrativa de Canarias, Sergio Luis Sánchez, disertará en el festival
Conscientis Fuerteventura sobre una ponencia que gira en torno a conseguir más
salud con menor gasto sanitario. El doctor Sánchez reconoce que la salud no
cotiza en bolsa en nuestro país, -ocupa el segundo puesto a nivel mundial en
consumo de medicamentos-, porque los intereses económicos de las farmacéuticas
predominan sobre la salud de los ciudadanos. La otra cara de la moneda se vive
en Suiza.
¿Por qué
acepta venir al festival Conscientis Fuerteventura?
Me parece una iniciativa muy necesaria, y una
oportunidad magnífica para que la población canaria incremente su conciencia
sobre la importancia de cuidar tanto el medioambiente como nuestra salud, el
medio interno y externo.
Usted es
presidente de la Sociedad Canaria de Medicina Integrativa que aglutina a más de
cien médicos de toda Canarias. ¿Cuál es el objetivo de esta sociedad?
Nuestro objetivo es difundir el concepto de
medicina integrativa, que implica tanto la medicina convencional como las
medicinas complementarias. En la sociedad hay médicos de todas las
especialidades, pediatras, ginecólogos, traumatólogos, etc…y también médicos de
medicinas complementarias como son homeópatas, naturistas, y de medicina china.
A todos, lo que más nos interesa es la salud de la población y la salud del
medioambiente, de manera que todos los compañeros médicos tienen espíritu
integrativo para tratar a los pacientes de la forma más adecuada y con los
medicamentos precisos, procurando no intoxicar ni dañar el organismo.
En el
festival Conscientis hablará sobre tener más con menor gasto sanitario. ¿Cómo
se consigue?
Todo esto parte de la estrategia de la OMS
(Organización Mundial de la Salud) programada desde el 2014 al 2023, que se
puede descargar de Internet, en la que uno de los elementos que se baraja está
enfocado en promover que todos los estados del mundo incluyan las medicinas
complementarias en los servicios nacionales de salud, de manera que si se
incluyen este tipo de terapias en la Seguridad Social se reduce el gasto
sanitario al incidir más en la medicina preventiva. Y los estudios realizados demuestran que esto ocurre
así, ya que las medicinas complementarias contribuyen a un menor gasto de
fármacos y a una mejora del nivel de salud del paciente.
Los
ciudadanos se están concienciando cada vez más sobre los efectos secundarios
que tienen los medicamentos y demandan una sanidad más preventiva, sin embargo
en nuestro país no ocurre así. ¿Cuál es la explicación?
Lo que ocurre es que la medicina integrativa
sirve a los intereses de la población pero merma los intereses de las
farmacéuticas, cuando está claro que el objetivo de la medicina es la salud. La
idea es utilizar todos los recursos terapéuticos a nuestro alcance de forma
escalonada y gradual, y de la forma más respetuosa posible con nuestra
fisiología. Entonces, cuando no queda más remedio que utilizar medidas
terapéuticas fuertes como el caso de los antibióticos, el organismo tiene que
estar muy bien preparado para poderlos utilizar bien.
Necesitamos estar bien formados y documentados
en todas las escalas, tanto en el personal sanitario como en medicina convencional
y complementaria. Tan importante es un buen cirujano como un buen homeópata. Lo
que está faltando en nuestro país es una formación reglada en medicinas
complementarias, sin embargo Portugal tiene su normativa sobre terapias
complementarias desde 2013, y muchos otros países también, pero España está a
la cola en este tema frente a Suiza que está a la cabeza, un país en el que
hicieron un referéndum hace cinco años y la población decidió incluir las
medicinas complementarias en su Seguridad Social. Luego dejaron cinco años para
comprobar si esa medida estaba siendo adecuada, y esa ratificación se confirmó
en 2017, año en el que entraron de forma definitiva las medicinas
complementarias en la Seguridad Social suiza.
Sin
embargo, en España el Gobierno está mirando para otro lado, incluso parece que
se está haciendo un boicot a las medicinas complementarias.
Uno de los motivos es que España es el segundo
país del mundo consumidor de medicamentos convencionales, según estudios
realizados en Inglaterra. Y desde esta óptica se puede comprender que los
intereses económicos de las farmacéuticas predominan sobre la salud de los
ciudadanos.
La salud no cotiza en bolsa, según explicó en
una entrevista publicada por La Vanguardia en 2007 al doctor Richard J. Roberts,
Premio Nobel de Medicina 1993, en la que el titular era: “El fármaco que cura
del todo no es rentable”. Y lo que viene a explicar es que la salud no da
ganancias, También considero ridículo que se plantee que la medicina no
convencional no es científica, cuando está siendo utilizada por millones de
personas en todo el mundo con muy buenos resultados y ayudan a reducir el gasto
sanitario.