¿Nos roban los cubiertos y pagamos la cena? por Andrés Briansó

img/b/R29vZ2xl/AVvXsEi4vm8TQ5S3-J08ICc_FOJWFJpdU1SABtQ9qAOR-eSaGqygTrUAGXAuKkdp1hDaFpvTrhzHSv2-aa2sAGEDZgigCzj6cWMaFaLl2g3dCdROFlfMDTTMfjglgo06Qyh6zXXK7Cuipz73gRw/s640/Andres_Brianso.jpg


Casi se nos había olvidado pero ha sido ella misma la que nos lo ha venido a recordar. Poderoso caballero es ‘Don dinero’.  Y no de cualquier forma, lo ha hecho en un pleno insular.

Doña Águeda Montelongo, portavoz del PP majorero ha solicitado que el Cabildo, es decir, entre todos, le paguemos los abogados de sus vergüenzas. Sinceramente creo que Doña Águeda ha perdido una oportunidad preciosa de pasar de puntillas ante un episodio más de esta historia de fraude y saqueo a la que, por desgracia, nos tiene acostumbrados el imputado Partido Popular. 
Dicho de otro modo, si has tenido la suerte de que tu padre no te pillara llegando tarde y algo perjudicado, se más espabilado y no le despiertes para pedirle pasta para la fiesta siguiente; en fin, parece que el pudor y el prestigio (o desprestigio) de algunas tiene precio, en este caso 15.640 euros exactamente. Pues bien,  si quiere que recordemos, vamos a recordar.

El lío del que hablan es el llamado caso Patronato, no le falta ni el nombre de peli de mafia, en el que la Sra. Montelongo aparecía como “autora de un delito continuado de malversación de caudales públicos, un delito continuado de prevaricación y un delito continuado de falsedad documental” y por ello se le pedían además de 6 años de inhabilitación para cualquier cargo público, 5 años de prisión.

 Esta pena desorbitada fue con toda probabilidad la que le salva de ser condenada.  Porque en la sentencia el juez considera como hechos probados que “se pagaron con fondos públicos gastos para actos electorales y orgánicos del PP, totalmente ajenos a la actividad del Patronato de Turismo”;  además considera que estos hechos probados son efectivamente constitutivos de delito. Por si fuera poco el encargado de hacer estos pagos y reservas declaró en juicio que cumplía órdenes de la jefa, su superior jerárquica tanto en el partido como en el Patronato. 

Además su firma aparece en todos estos pagos a facturas falseadas y delictivas. Ante este agolpamiento de flechas de neón indicando la culpable, la única estrategia de la defensa fue que la Vicepresidenta del Patronato, la Consejera del Cabildo, la Diputada del Parlamento de Canarias  -déjenme coger aire- en fin , que la Presidenta del PP no sabía lo que firmaba. Oh yeah, dice que no sabe lo que firma. ¿Cómo te quedas?

Menuda defensa más triste, al estilo Infanta, al estilo machista: “No, es que esas cosas las lleva mi marido”. Menudo canto a la profesionalidad de los cargos públicos, a su responsabilidad, a su diligencia, menuda poca vergüenza. Al final el juez ante la pena mínima que merecen estos hechos, sí señora 5 años de talego, resuelve con una absolución formal y una clara condena moral estableciendo que aunque no se puede demostrar al 100% que ella diese las órdenes es “posible y probable que ello aconteciera”.

Es decir,  no convenció al juez y no nos ha convencido a los consejeros de Podemos, y como nosotros sí consideramos que somos responsables de lo que votamos y de lo que firmamos en el pasado pleno votamos “no” a correr con los gastos de sus calamidades. Nos roban los cubiertos y encima quieren que le invitemos a la cena.


Andrés Briansó, consejero de Podemos en el Cabildo de Fuerteventura