La alcaldesa de Ribadesella descansa estos días en Fuerteventura, eligiendo la isla por cuarta vez como lugar de Vacaciones
Eva
Ogriseck
viajó por primera vez de Alemania a Fuerteventura en 1977. Se
alojó en el Hotel
Oliva Beach en Corralejo, que en esos momentos apenas llevaba
unos meses
abierto. Cuarenta años después, esta mujer sigue eligiendo la
isla para pasar
sus vacaciones y el Oliva Beach como lugar en el que descansar.
Cuatro
décadas después Eva sigue mostrando su amor por Fuerteventura.
Este año ha
vuelto a repetir, esta vez acompañada de su hija Brigitte. El
vicepresidente y
consejero de Turismo, Blas Acosta, se acercó recientemente al
hotel para
saludarla y agradecer la fidelidad que, durante todo este
tiempo, ha mostrado
con el destino majorero.
Acosta
señaló que personas como Eva “representan un orgullo para todas
las personas
que, de alguna manera, estamos vinculados con el turismo en la
isla”. “Gracias
a ellos, que apostaron en un primer momento por nuestro destino
cuando aún
empezábamos a andar, hoy podemos hablar de un destino
consolidado”.
Estos
días
también ha estado visitando la isla la alcaldesa de Ribadesella,
Charo
Fernández. Acosta junto al gerente del Patronato de Turismo
majorero, Moisés
Jorge, saludaron a la alcaldesa que, por cuarta vez, elige la
isla como lugar
de vacaciones.