El Cabildo de Fuerteventura continúa con la investigación en curso sobre el caso de envenenamiento de guirres. Desde la Corporación insular se quiere resaltar que se trata de un incidente aislado, el segundo de esta envergadura desde que hace ya veinte años se comenzaran los trabajos de conservación y protección de la especie y que, gracias a la colaboración ciudadana y la rápida y efectiva gestión de los agentes de policía local, agentes de Medio Ambiente y Seprona, no ha derivado en unas mayores consecuencias.
El pasado mes de abril una vecina de Cofete comunicó el hallazgo de unos cadáveres de guirre majorero (Neophron percnopterus majorensis), y un ejemplar vivo con posibles síntomas de envenenamiento. Inmediatamente, el Cabildo de Fuerteventura activó el protocolo establecido en la Estrategia Canaria contra el uso ilegal del veneno, con la intervención de los agentes de Medio Ambiente y el apoyo de una unidad dron del propio Cabildo y la Unidad Canina Antiveneno adscrita al Proyecto LIFE Egyptian Vulture.
Los agentes de Medio Ambiente se personaron en la zona de Cofete realizando una primera inspección, localizando dos cadáveres de guirre y un ejemplar vivo que precisó de inmediata intervención, trasladándose al servicio veterinario del Oasis Wild Life La Lajita, donde recibió la atención necesaria para su recuperación. Este ejemplar vivo fue liberado totalmente sano el día 1 de junio. Además, se continuaron realizando las labores de rastreo del territorio para detectar y retirar todos los cadáveres de animales afectados y la posible detección de cebos envenenados, con el fin de evitar nuevos decesos.
A lo largo de estos días se ha continuado con las labores de rastreo e inspección, en coordinación con personal técnico del Servicio de Biodiversidad del Gobierno de Canarias y personal adscrito al Proyecto Life. Se ha inspeccionado un área superior al millón de metros cuadrados, confirmándose el hallazgo de ejemplares afectados de guirre, cuervos, gaviotas, aguililla y gatos domésticos. Tres de los ejemplares afectados contaban con emisores GPS/GSM, de los que se ha obtenido información sobre sus movimientos antes de su muerte y ayudarán a conocer la posible causa de este grave suceso.
Según la consejera de Medio Ambiente, Marlene Figueroa, “ha sido importante la colaboración y coordinación entre las administraciones públicas y entidades privadas, máxime si tenemos en cuenta la situación actual de alarma en la que nos encontramos”.
Conforme al protocolo antiveneno, los agentes de Medio Ambiente custodiaron el traslado de los cadáveres hallados al Instituto Universitario de Sanidad Animal de la Facultad de Veterinaria para la realización de las necropsias correspondientes, así como muestras biológicas al Servicio de Toxicología Clínica y Analítica de la ULPGC (SERTOX) para realizar los análisis toxicológicos pertinentes y determinar las posibles sustancias que han causado el envenenamiento. Los análisis preliminares obtenidos han identificado el veneno empleado, tratándose de un pesticida altamente tóxico de uso prohibido en la Unión Europea desde el año 2007.
“Resulta necesario recordar la importancia y afección negativa que el uso ilegal de venenos puede tener sobre la Biodiversidad, así como sobre la salud pública, estando tipificado como delito en el artículo 336 del Código Penal, siendo en estos momentos una de las principales amenazas para el guirre”, indica Figueroa.
La consejera del área hace un llamamiento a los ciudadanos para recordar lo importante que es comunicar de manera inmediata este tipo de incidencias, agradeciendo la colaboración de los vecinos de Cofete, un aviso que ha favorecido la rápida actuación por parte de los agentes de Medio Ambiente, evitándose la muerte de una hembra de guirre.
Según el Jefe de Comarca de los agentes de Medio Ambiente del Cabildo de Fuerteventura, “desde que se tuvo conocimiento de los hechos se activó el protocolo establecido en la Estrategia Canaria de lucha contra el uso de venenos en el medio no urbano, poniéndolo en conocimiento de la Fiscalía de Medio Ambiente, que coordinó las actuaciones realizadas con el Servicio de Protección de la Naturaleza de la Guardia Civil”.
“Queremos agradecer la colaboración prestada por la Unidad Canina especializada de los agentes de Medio Ambiente del Cabildo de Gran Canaria, que ayudó a realizar una tercera inspección de la zona afectada. Se continúa en el proceso de investigación cuyos resultados y conclusiones serán trasladados a Fiscalía de Área de Puerto del Rosario, conforme procede y como se ha venido haciendo hasta ahora”, explica la consejera
Desde el Servicio de Medio Ambiente del Cabildo de Fuerteventura se solicita la colaboración de la ciudadanía para ayudar a erradicar el veneno de nuestro medio natural, recordando que, en el caso de encontrar en el campo algún cebo, animal muerto o herido, se debe comunicar el incidente inmediatamente, al objetivo de activar el protocolo, llamando al 112 o al teléfono de guardia de los agentes de Medio Ambiente (626 98 23 71).
Se recomienda asimismo no tocar ni manipular nada en la zona del hallazgo, debido al peligro que conlleva y además puede dificultar la investigación. Además, se debe permanecer en el lugar del hallazgo hasta la llegada de los agentes de la autoridad y facilitar toda la información posible en el incidente para su esclarecimiento.