Cabildo de Fuerteventura participa en el proyecto de fomento de la economía circular que se lleva a cabo en la Granja Experimental de Pozo Negro
El proyecto “Fomento de la economía circular en regiones áridas a través de sistemas multifuncionales de manejo del suelo: conservación de la biodiversidad, gestión de residuos, sumideros de carbono y lucha contra la desertificación”, que se está llevando a cabo en la Granja Experimental de Pozo Negro tiene como objetivo la restauración de hábitats, conservación de biodiversidad nativa y producción sostenible de forraje en Fuerteventura.
En la mañana de hoy, viernes 1 de julio, ha recibido la visita del consejero de Transición Ecológica, Lucha contra el Cambio Climático y Planificación Territorial del Gobierno de Canarias, José Antonio Valbuena, el presidente del Cabildo de Fuerteventura, Sergio Lloret López, y el consejero de Agricultura, Ganadería y Pesca, David de Vera, para supervisar el progreso de este proyecto experimental y pionero en Canarias.
Al itinerario por las instalaciones donde se lleva a cabo dicho proyecto se sumaron, el viceconsejero regional de Lucha contra el Cambio Climático, Miguel Ángel Pérez, y el director general de Transición Ecológica autonómico, José Domingo Fernández, además de miembros del Ayuntamiento de Antigua y otros consejeros de la Corporación insular.
Esta iniciativa se desarrolla a través de la Consejería de Transición Ecológica, Lucha Contra el Cambio Climático y Planificación Territorial del Gobierno de Canarias, en colaboración con el Cabildo de Fuerteventura, desde la Consejería de Agricultura, Ganadería y Pesca, quien, además de las instalaciones, presta asistencia técnica y hace entrega de plantas y semillas de sus viveros para llevar a cabo este proyecto de energía circular. Cuenta también con la colaboración de la Consejería de Sostenibilidad Medioambiental.
Enmarcada dentro del programa operativo FEDER 2014-2020 y con una inversión de 1.419.528,98 euros, este plan se propone desarrollar sistemas multiespecie de flora nativa como método de rehabilitación de suelos degradados, así como la generación de sumideros de biodiversidad y carbono, y el empleo de residuos ganaderos para la elaboración de enmiendas orgánicas de suelos y el manejo agroecológico de sistemas multiespecie de flora propia de la isla con potencial forrajero para convertirse en sumideros de biodiversidad y carbono.
La ruta por la Granja Experimental de Pozo Negro incluyó paradas en las parcelas de cultivo de multiespecies de flora nativa de Fuerteventura con potencial forrajero, el vivero de planta nativa de la isla donde se está llevando a cabo la producción de veinte especies de flora, las vermicomposteras dedicadas a la producción de lixiviados de lombriz para el aporte orgánico de suelos y plantaciones y las parcelas donde se están acondicionando los terrenos para testar experiencias de cultivo de forrajes nativos.
El presidente insular, Sergio Lloret López, ha destacado que “en la visita realizada hoy a la Granja Experimental de Pozo Negro analizábamos la evolución de esta experiencia innovadora en Fuerteventura en materia de forraje con especies autóctonas que nos permiten seguir avanzando hacia la autosuficiencia alimentaria, especialmente en cuanto al sector ganadero”.
Lloret confía en que “pronto pasemos a la fase en la que estos forrajes puedan ser utilizados por el sector ganadero de la isla y este proyecto suponga una iniciativa más que ayude al sector a atravesar la difícil situación en la que se encuentra tras la subida de precios de los insumos animales”.
“Dentro de este proyecto, la Granja Agrícola Experimental de Pozo Negro aporta personal e invernaderos para el desarrollo de especies autóctonas de forrajero”, explica el consejero insular, David de Vera. “Todo ello, complementando al resto de actuaciones que desarrolla la Granja Experimental de forma directa para la recuperación de grano y semilla tradicional de Fuerteventura, con el objetivo de ir recuperando progresivamente este grano”, añade De Vera.
La previsión es que la iniciativa se extienda hasta 2023, y que en ese plazo se compruebe el funcionamiento del plan con la recuperación de hábitats en zonas áridas o semiáridas, además de complementar esta línea con la exploración del uso de las especies vegetales nativas de la isla de Fuerteventura, como potenciales recursos para la alimentación ganadera y su posible incidencia en la calidad de los productos obtenidos.
Además, el proyecto contempla a su vez dos líneas de actuación para la producción de forrajes multiespecie en la Isla de Fuerteventura que pasan por la producción en gavias funcionales y la producción en suelos agrícolas abandonados mediante la introducción de riego con recursos hídricos no convencionales.