Cabildo de Fuerteventura pone en marcha un juego de rol para divulgar los procesos de participación ciudadana entre la sociedad majorera

  


El Cabildo de Fuerteventura, a través de la Consejería de Participación Ciudadana y Gobierno Abierto, que dirige Jonathan Gil, ha puesto a disposición de la sociedad majorera un juego de rol para divulgar el Reglamento Insular de Participación Ciudadana.
 



El personal del Cabildo y ayuntamientos han probado por primera vez esta herramienta en la mañana de hoy, martes, día 7 de junio, ya que la aplicación del reglamento depende en gran medida de la formación del personal técnico. Estuvieron presentes, también, el presidente insular, Sergio Lloret López, la vicepresidente primera, Lola García, el consejero Jonathan Gil y los concejales Joana Pérez (La Oliva), Rodrigo Berdullas (Pájara) y Mayka Marrero (Tuineje), así como representantes del Espacio de Participación Social.
 
Según el presidente del Cabildo, Sergio Lloret, agradeció la iniciativa del Servicio de Participación Ciudadana “que tiene como objetivo facilitar el conocimiento de las administraciones por parte de ciudadanía y asociaciones, así como del Reglamento Insular de Participación Ciudadana”.  
 
El consejero insular, Jonathan Gil, explicó que “la finalidad es hacer llegar a la ciudadanía el Reglamento Insular de Participación Ciudadana aprobado hace escasamente un año. Queríamos aproximarlo a la población y esta es solo una parte de este proceso de comunicación directo a la ciudadanía”.
 
El juego está diseñado para divulgar los diferentes canales, mecanismos y procesos de los que dispone la ciudadanía para ejercer su derecho ala participación. La herramienta servirá, también, para extender este conocimiento en las diferentes corporaciones locales y la propia institución insular.
 
El texto del Reglamento Insular de Participación Ciudadana recoge una serie de derechos participativos e instrumentos para que la ciudadanía majorera participe en las decisiones públicas a nivel insular. Para facilitar la difusión de esta información, se ha creado un juego de rol denominado 'Participa Fuerteventura’, del que se organizarán partidas con asociaciones, personal técnico de la administración y ciudadanía en general.
 
Se trata de un tablero al estilo del juego de la oca, pero a escala humana, de tres por tres metros, que se extenderá en plazas y parques para que las personas participantes caminen recorriendo los distintos itinerarios participativos que recoge el reglamento. Hay unos objetivos que cumplir y también casillas comodín de las que solo se sale si se responde correctamente a unas preguntas, además de un dado que introduce el “factor azar” en la partida. El carácter lúdico de la actividad no resta rigor informativo al detallado repaso que ofrece el recurso sobre las posibilidades legales del reglamento, pero pone especial acento en fomentar la participación ciudadana en Fuerteventura. 
 
 
El principal objetivo de esta campaña divulgativa es llegar a ofrecer una herramienta comunicativa para la ciudadanía que ya participa de la gobernanza pública desde colectivos y asociaciones, y al mismo tiempo atraer para que comiencen a hacerlo otros sectores de la población que desconocen estas posibilidades o nunca han tenido acceso a las mismas en un lenguaje accesible.
 
Mecanismo del juego
 
El tablero, ilustrado con imágenes de la isla, representa el proceso de la participación desde que surge la idea o la necesidad, de activar un derecho participativo, hasta que se hace realidad dicho proyecto o al menos se intenta.
La salida que corresponde a cada jugada la determinará su tarjeta-personaje, en la que leyendo sabrá cuál es su objetivo participativo, y hacia dónde tiene que dirigirse en primer lugar. 
 
Los personajes se moverán por el tablero según el proyecto descrito en su tarjeta y usando el dado irán transitando por casillas fijas o casillas comodín. El juego convierte así la información del reglamento en historias con las que la gente pueda empatizar y aplicar a sus realidades cotidianas. Se cuentan así historias de asociaciones culturales, de estudiantes de instituto, personal de Cabildo y ayuntamientos, padres y madres del A.M.P.A. y ciudadanía en general. El juego finalizará cuando alguien llegue a la casilla 32. Una vez ahí, se realiza una puesta en común donde se vincula lo experimentado en el juego con las realidades propias de quien haya participado.
 
Tanto con este uso de la información a través de la narrativa, como con la representación gráfica autocentrada en la isla majorera, se busca generar una experiencia que active procesos significativos recogidos en el reglamento orgánico como foros ciudadanos, consultas populares, pero que también refuerce los conocimientos sobre cultura participativa y democrática en general.