Un clamoroso
minuto de silencio en memoria de las víctimas, y muy concretamente, de Vanesa
Santana, asesinada el pasado mes de junio por su primo en su casa de Valle de
Santa Inés, precedió a la puesta en escena del espectáculo de teatro y danza
‘Si duele no es amor’. Una obra que a través del arte lanza un mensaje poderoso
a las y los espectadores, jóvenes escolares muchos de ellos, que la
presenciaron: que del maltrato machista se sale, y que los hombres tienen una responsabilidad
importante en la erradicación de esta lacra social. Hoy, miércoles, 21 de
noviembre, el Auditorio Insular acogió el acto institucional del Cabildo de
Fuerteventura ante el próximo 25 de noviembre, Día Internacional para la
eliminación de la violencia contra las mujeres, al que asistió la familia de la
joven majorera.
El presidente del Cabildo, Marcial Morales, las consejeras de
Biene
star Social, Rosa Delia Rodríguez, e Igualdad, Yanira Domínguez, respectivamente,
reiteraron el compromiso de la Corporación en la lucha contra la violencia de
género, “una de las violaciones de los derechos humanos más extendidas en el
mundo”, en palabras de Morales.
“En el
Cabildo estamos poniendo los cimientos para que Fuerteventura sea una isla más
amigable con las aportaciones que nos hace el Consejo Insular de la Infancia y
Adolescencia. Este lunes nos entregaron un folleto con las indicaciones, dosis
y nombre de la vacuna de la paz, la no violencia y el buen trato. Desde la
mirada de las niñas y niños estoy convencido que podemos ir dando pasos para
que la erradicación de la violencia sea una toma de conciencia desde edades
tempranas”, continuó.
Por su parte,
la consejera de Bienestar Social, Rosa Delia Rodríguez, puso el acento en la
necesidad de proteger a los menores cuyas madres sufren la violencia de hombres
maltratadores. “Ponemos de manifiesto, nuevamente, nuestro rechazo y
preocupación por el aumento de menores utilizados por sus padres como
instrumento de control y de poder sobre sus madres. Por ello hemos adquirido el
firme compromiso de implementar todas las medidas de coordinación
interadministrativa para proteger, defender y liberar a las mujeres y menores
víctimas de esta lacra”, aseguró.
Aun
reconociendo la labor realizada en los últimos años, Rodríguez recordó que
queda mucho por hacer todavía y pidió no olvidar a las 971 mujeres y menores
que han sido asesinadas desde el año 2003. “Somos un país referente en
la lucha contra la violencia de género en la Unión Europea. Pero no es suficiente. Debemos seguir
trabajando ya que se cuentan por miles las personas que
sufren cada día el quebranto de la mayor violación de los derechos humanos”.
Rodríguez agradeció asimismo “la solidaridad de todas esas personas anónimas
que muestran sus condolencias y acompañan los minutos de silencio y fijamos la
mirada en quienes, además, se esfuerzan por debilitar la multitud de micro
violencias invisibles y sistemáticas que sustentan relaciones basadas en el
trato desigual”.
El Manifiesto
institucional fue leído por la consejera de Igualdad, Yanira Domínguez. El
documento recuerda que “la ley regional 16/2003 de 8 de abril de Prevención y
Protección Integral de las mujeres plasma lo contemplado en el Convenio de
Estambul, el acuerdo internacional de mayor alcance, que remarca que la
violencia de género es una manifestación del desequilibrio de poder entre
hombres y mujeres, y con cuyos preceptos estamos plenamente comprometidos en el
Cabildo de Fuerteventura”.
El texto
recoge la “rotunda e inequívoca repulsa” del Cabildo a sus múltiples
expresiones. “Este grave problema social necesita actuaciones que no se centren
en las consecuencias de este drama individual y colectivo. Es necesario
insistir en los quiénes y los porqués para poder actuar con responsabilidad,
eficiencia y garantía; la violencia de género la ejercen los hombres contra las
mujeres y tiene sus raíces en la subordinación y dominación de las mujeres por
los hombres. En el Cabildo de Fuerteventura nos sumamos al llamamiento a todas
las personas, en particular a los hombres y niños, para que cambien su actitud y
les instamos a revisar actitudes cotidianas y a desterrar estereotipos, roles,
prejuicios y conductas sexistas y machistas, como pasos ineludibles para evitar
que se sigan reproduciendo modelos de relación entre hombres y mujeres basados
en la desigualdad y la discriminación”, explica.
“Si realmente
queremos acabar definitivamente con la violencia hacia las mujeres, el foco de
atención debemos ponerlo en los varones, que son quienes la ejercen. Además, éstos
se han de implicar no solo en la denuncia y rechazo, sino en la importancia de
una educación cada vez más igualitaria, en el trabajo de los valores de
igualdad y tolerancia cero hacia las violencias de género. Y es prioritaria la
contundencia y fortaleza de todos los sectores de la sociedad para advertir a
los agresores de que no consentiremos ni una sola manifestación de la violencia
contra las mujeres: violencia de pareja o ex pareja, violencia sexual,
violencia en el ámbito laboral, acoso por razón de género, acoso sexual, trata
de mujeres y niñas, explotación sexual, violencia contra los derechos sexuales
y reproductivos de las mujeres, matrimonio a edad temprana, concertado o
forzado, mutilación genital femenina, feminicidio, asó como cualquier otra
forma de violencia que lesiones o sea susceptible de lesionar la dignidad, la
integridad o libertad de las mujeres”, continúa el texto.
“La violencia
de género es un problema estructural y como tal es primordial abordarla desde
las edades más tempranas. Es esencial exponer, informar y concienciar contra
ellas desde la infancia y en especial, en la adolescencia y juventud. Por ello
el Cabildo de Fuerteventura, en colaboración con el Instituto Canario de
Igualdad, centra este año su campaña institucional en alertar sobre la
violencia sexual y dirige esta actuación a la población masculina joven y
adolescente. Con ella se quiere incidir en el cambio de actitudes agresivas de
los hombres hacia las mujeres en el ámbito sexual, para que muestren un total
rechazo al abuso y uso de la violencia y para fomentar la denuncia de las
agresiones sexuales. Persigue, en definitiva, que los y las jóvenes mantengan
relaciones respetuosas e igualitarias. Porque solo con la igualdad plena, real
y efectiva se conseguirá acabar con la violencia hacia las mujeres”, expone.
“La eliminación de
esta violencia va más allá de resoluciones, declaraciones o convenios
internacionales, nacionales o locales y más allá de la elaboración de normativa
o de decisiones políticas, actuaciones e instituciones; requiere del compromiso
activo y de la implicación colectiva, decidida y tangible (…) Es incuestionable
que cada vez existe una mayor concienciación, sensibilización y
responsabilidad, no solo institucional, sino también social y que más
voluntades se suman y se mueven para avanzar hacia la eliminación de la
violencia de género para conseguir una sociedad más justa, libre, democrática y
donde las relaciones entre mujeres y hombres se desarrollen en plena igualdad”,
concluye el Manifiesto