Coalición Canaria La Oliva pedirá en el próximo pleno que el Ayuntamiento “ponga todos los medios a su alcance para impedir la construcción de Dreamland en la ubicación actual”.

 

Coalición Canaria La Oliva es favorable y apoya el proyecto cinematográfico Dreamland para el municipio, “pero en ningún caso la ubicación propuesta en el entorno del Parque Natural de las Dunas de Corralejo”.

 

Por ese motivo, siendo conscientes del potencial del proyecto pero de su desafortunada ubicación, el portavoz y candidato a la alcaldía de CC, Isaí Blanco, anunció que su grupo presentará una moción para debatir en el próximo pleno, que se celebrará el 22 de diciembre, en la que pedirá a los diferentes grupos políticos “que declaren claramente que Dreamland, en el lugar propuesto, no es el proyecto que necesita La Oliva”.

 

El pasado 28 de noviembre, el pleno del Cabildo aprobó la consideración de “interés insular” del proyecto Dreamland para permitir que se pueda construir en suelo rústico, con los votos a favor del PSOE, Podemos, NC y AMF, y los votos en contra de Coalición Canaria y el PP. “Esto puede dar lugar a confusión, ya que la candidata del PP en La Oliva, Pilar González, anteriormente se había declarado favorable”, recuerda Blanco.

 

El candidato a la alcaldía insiste en que Coalición Canaria es favorable al proyecto, como así lo han manifestado en varias ocasiones, “pero no compartimos que se ubique en una zona de terreno virgen que está al lado de las dunas de Corralejo, cuando hay otros lugares en los que se puede desarrollar sin necesidad de estropear nuestro patrimonio natural y el futuro de todos”.

 

Blanco critica la posición de los grupos políticos que han votado a favor de la ubicación y emplaza al PP a que sea coherente con su posición a nivel insular “y pida a Pilar González que ponga todos los medios a su alcance para impedir la construcción de Dreamland en la ubicación actual”.

 

CC La Oliva critica el hecho de que en el Cabildo se haya cambiado la clasificación del suelo rústico haciendo un uso torticero de la Ley, que permite hacerlo para obras y servicios que tengan un interés para el conjunto de la comunidad. “En este caso se trata de un proyecto privado que se construye en suelo rústico porque es mucho más barato que en otro tipo de suelos, pero que supone un daño irreparable al legado común de todos los majoreros”, afirma Blanco.

 

“Es incomprensible que se quiera hacer en una zona que no está urbanizada y para la que han de ser creadas diferentes infraestructuras”, añade, y advierte que “esto abre la puerta a que se siga construyendo en ese entorno por lo que nos lo cargaremos para siempre; todos sabemos que hay alternativas y queremos que el ayuntamiento no mire para otro lado y haga uso de sus competencias para frenar este disparate”.