La concejala de Participación Ciudadana, Rita Darias, y el arquitecto
Bentejuí Hernández participaron en las mañanas de la Cope
Puerto
del Rosario 15 de mayo.- José Antonio Corraliza, psicólogo ambiental y
participante en el festival Conscientis Fuerteventura, en declaraciones a la
Cope aseguró que “propondré un Decálogo de Calidad de Espacios Públicos” en la
ponencia que expondré en el Festival Conscientis. Compartieron espacio la
concejal de Participación Ciudadana, Rita Darias, y el arquitecto del estudio
FaseBase Bentejuí Hernández.
Rita Darias aseguró que cuando Marga Bethencourt
nos presentó el proyecto “nos pareció arriesgado, pero valoramos el esfuerzo
que hicieron ella y su equipo porque consideramos que el programa es magnífico,
y con eso nos quedarnos” y añadió que la organización ha sido fundamental, y
gracias a todos los agentes implicados se puede hacer realidad este festival.
En paralelo, el proyecto Mestura se lleva
desarrollando desde hace seis meses con el fin de regenerar espacios como la
Gavia de Los Hormiga. Precisamente, Bentejuí Hernández señaló la necesidad de
visibilizar este lugar porque “muchos de los vecinos que viven en el barrio del
Charco ni siquiera lo conocen”.
Por su parte, José Antonio Corraliza, aseguró
que varios de los problemas de salud actuales se explican por la falta de
contacto con la naturaleza, ya que “mucha gente piensa que esto de la
naturaleza está de moda, lo eco, lo verde, y lo que muestran nuestras
investigaciones es que está ocurriendo algo mucho más profundo vinculado a la
entidad de la especie homo sapiens a la que todos pertenecemos”. “Hay que tener
en cuenta que nuestro modo de vida está basado en un proceso de evolución,
puntualizó, en el que ha sido crucial el contacto con la naturaleza, con el
agua, con los árboles, con todos los parámetros que conforman lo que ahora
llamamos el paisaje.
Hablamos de algo que no es una moda, recalca
Corraliza, sino de algo que nos permite reconectar con aspectos básicos de
nuestro funcionamiento psicológico. Y eso es lo que a mí me hace decir que “la
naturaleza es una gran medicina para el bienestar humano,” enfatiza el psicólogo
ambiental.
Corraliza considera que durante mucho tiempo la
Naturaleza ha sido una fuente de estimulación para la especie humana pero
también una continua amenaza, y a consecuencia de este último factor se
construyeron ciudades amuralladas, pero “nuestro sistema nervioso aún no está
adaptado a este sistema que hemos conformado con los nuevos hábitats en las
grandes ciudades y las murallas que hemos puesto”.
De hecho, se puede producir el llamado
‘trastorno por déficit de naturaleza’ que es cuando echamos de menos la
estimulación que nos ofrece la naturaleza, por eso cada cierto tiempo
necesitamos recargar las pilas, y el ejemplo más claro está en lo que ocurre en
las grandes ciudades cuando llega el fin de semana: la gente sale de estampida,
simplemente buscando que el aire acaricie su cara, o sentir en qué estación
estamos y que no sólo lo sepas por el calendario.
El psicólogo ambiental precisó que las
investigaciones realizadas han demostrado que nos recuperamos mucho antes de
procesos inducidos de estrés cuando estamos contemplando escenas de naturaleza.
Por ejemplo, la capacidad para responder a eventos estresantes de niños que
viven en ciudades depende del nivel de naturaleza cercana que tienen. Si por
ejemplo, visitan un parque o tienen vistas agradables desde su habitación, se
reduce el nivel de estrés.
Regenerar
espacios
Respecto a los factores que influyen en la
recuperación de un espacio público, Corraliza puntualiza que “el factor que más
ayuda a que se regenere un espacio público es que lo usen los ciudadanos”, sin
embargo muchos espacios públicos han sido diseñados en coyunturas un poco
oportunistas, lo típico de un parque que se inaugura unos meses antes de unas
elecciones, y a veces se diseñan como espacios que están muy bien formalmente,
pero no se elabora un plan de uso público de esos espacios. ¿Y de qué depende
que se use un espacio público? De que sea un espacio cercano, saludable. De
hecho, en la ponencia que voy a exponer en el Festival Conscientis “propondré
un decálogo de Calidad de Espacios Públicos”.
Para Corraliza un espacio público debe de tener
una gran diversidad de usos y de usuarios, y “una de las cualidades más
atractivas de un espacio público es que te sientes, y sin hacer nada, te
entretenga, te divierta”.
En mi opinión, lo que nos falta en muchos
espacios públicos no es dinero para hacerlos, sino que “la cualidad más
atractiva de un espacio público es que promueva encuentros casuales, que
facilite la interacción y el contacto entre los humanos”, de ahí la necesidad de
“repensar los espacios urbanos”.
Por su parte, Bentejui Hernández, comparte la
misma línea de pensamiento que José Antonio Corraliza. “La ciudad son los
espacios públicos y compartidos donde nos relacionamos, esos lugares que
reconoces y visibilizas cuando visitas una nueva ciudad, ya sean abiertos o
cerrados, que propician otro tipo de
interacciones con otras personas”. El arquitecto considera que las ciudades
“hay que diseñarlas manteniendo las lógicas del territorio que antes se tenía
más en cuenta a la hora de construir, pero ahora nos podemos encontrar con
problemas por falta de entendimiento con el territorio y desvinculación con la
naturaleza”.