Consejo Insular de Aguas de Fuerteventura ejecuta obras en el barranco de Guisguey para almacenar agua de lluvia

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El Consejo Insular de Aguas, dependiente del Cabildo de Fuerteventura, lleva a cabo una serie de obras en el barranco de Guisguey para aprovechar el agua de lluvia, evitar que se pierda tierra de la superficie al mar y mejorar el nivel y la calidad del agua almacenada en el subsuelo de la Isla. 

El presidente de la Corporación insular, Marcial Morales, visitó hoy, miércoles, día 7 de diciembre, estos trabajos con el consejero de Aguas, Andrés Díaz Matoso, y el técnico del Consejo Insular de Aguas Domingo Montañez.

"Fuerteventura tiene capacidad para almacenar 7 millones de metros cúbicos de agua pero es importante tener pequeñas 'coladeras' para recargar gavias, con agua para cultivos, e impedir que el agua de lluvia y la tierra se pierda en el mar", dijo Morales en relación con este proyecto denominado Vertido Cero. 

"Queremos que Fuerteventura duplique su capacidad de depósito de agua cuando llueva", añadió.

Con este proyecto, que cuenta este año con una inversión de 500.000 euros, se cumple el objetivo hidrológico sobre aprovechamiento de las aguas pluviales de escorrentía.  

Las obras que se ejecutan en la subcuenca del Valle de Guisguey, principalmente en el tramo de cauce del Barranco de Guisguey comprendido entre los denominados Barranco del Sabio y Barranco de Valle Corto, de unos 4.350 metros de longitud, están encaminadas a la restitución del lecho y evitar la degradación de sus márgenes. Para ello se ejecutan ocho hidrotecnias transversales al cauce para la retención agua y sedimentos, así como la construcción de tres desarenadores que permiten disminuir la salida de tierra o material de arrastre al mar.


Además de estas actuaciones, durante este año se han ejecutado otras tales como las hidrotecnias o diques y muros de encauzamiento en el cauce público del Barranco de Jaifa, y desarenadores del Barranco de Pozo Negro.