En la despatologización
aún nos queda un largo camino, puesto que la transexualidad sigue figurando
como trastorno de la identidad sexual y desde aquí exigimos que desaparezca
como tal.
En la mañana del 17 de mayo, se ha desarrollado el acto de izada de bandera y lectura de manifiesto en defensa de los derechos humanos LGTB, así como del colectivo VIH/sida.
En la mañana del 17 de mayo, se ha desarrollado el acto de izada de bandera y lectura de manifiesto en defensa de los derechos humanos LGTB, así como del colectivo VIH/sida.
La homosexualidad (y con
ella desgraciadamente incluidas la bisexualidad y la transexualidad) está
castigadas penalmente en más de 70 países y en 8 países ser LGTB está castigado
con la pena de muerte.
En las zonas de Iraq y Siria donde ha tomado el control
el grupo terrorista ISIS, la situación ha empeorado abismalmente para la
población LGTB.
El grupo terrorista ha elegido el delito de sodomía como
referente para aterrorizar a la población con ejecuciones dantescas que desde
todas las organizaciones LGTB condenamos enérgicamente y exigimos presión
internacional para la desaparición de este grupo terrorista.
La específica
situación del colectivo transexual sigue siendo durísima. Los ataques
tránsfobos continúan, en especial en Centroamérica, Brasil o Jamaica, donde
hemos denunciado incluso asesinatos a pedradas por parte de grupos a mujeres
transexuales ante la indiferencia de las autoridades.
El secretario de organización, Albert Concepción, durante la lectura del manifiesto afirmó que “ en Europa hemos avanzado mucho pero desgraciadamente aún tenemos que denunciar sentencias del TJUE que sigue uniendo el concepto homófobo de “grupo de riesgo” a la infección por VIH en vez de asumir la doctrina médica de “práctica de riesgo”.
El secretario de organización, Albert Concepción, durante la lectura del manifiesto afirmó que “ en Europa hemos avanzado mucho pero desgraciadamente aún tenemos que denunciar sentencias del TJUE que sigue uniendo el concepto homófobo de “grupo de riesgo” a la infección por VIH en vez de asumir la doctrina médica de “práctica de riesgo”.
En nuestro país, hemos pasado de
ser una ciudadanía de segunda a ver reconocida nuestra dignidad, con Leyes como
la del Matrimonio Igualitario, o la llamada Ley de Identidad de Género, de 2007”
Para Altihay, la lucha, la reivindicación y las aspiraciones, no puedan quedar ahí. Debemos ser conscientes de que la Igualdad Real sigue pendiente, que seguimos sufriendo agresiones, verbales y físicas, todos los días, por nuestra diversidad sexual y de género, que nuestras hijas e hijos sufren discriminación, que hay muchas personas que todavía se ven obligadas a permanecer en su armario particular porque no tienen recursos para vivir con la dignidad que merecen, incluso en una ciudad, en una Comunidad como la nuestra.
Para Altihay, la lucha, la reivindicación y las aspiraciones, no puedan quedar ahí. Debemos ser conscientes de que la Igualdad Real sigue pendiente, que seguimos sufriendo agresiones, verbales y físicas, todos los días, por nuestra diversidad sexual y de género, que nuestras hijas e hijos sufren discriminación, que hay muchas personas que todavía se ven obligadas a permanecer en su armario particular porque no tienen recursos para vivir con la dignidad que merecen, incluso en una ciudad, en una Comunidad como la nuestra.