Es presidente del colegio de arquitectos de Fuerteventura pero se está ganando el reconocimiento internacional por su faceta más artística.
Hugo Rami vive un sueño viajando de galería en galería.
Acaba de regresar de Italia y marcha de nuevo rumbo a Londres donde espera aprender más sobre los entresijos que rodean al mundo del arte y su comercialización.
Los galeristas de todo el mundo se lo rifan y en Fuerteventura apenas se conoce su innovadora obra basada en el dibujo digital.
Un artista que rompe moldes, que revoluciona el arte y que, de momento, no es profeta en la tierra donde reside.