El Presidente del Cabildo de Fuerteventura , Blas Acosta, en nombre de toda la Corporación Insular, felicita a Mercedes Contreras, que ha alcanzado el máximo grado universitario como Doctora, al mismo tiempo que muestra su orgullo por aquellas personas que se forman y consiguen sus máximos títulos.
La Doctora presentaba su Tesis Doctoral, bajo el título 'La Articulación de la Autonomía Local de Islas y Municipios en el ámbito material de la Ordenación del Territorio y el Urbanismo', dirigida por el Catedrático de Derecho Administrativo de la Universidad Autónoma de Madrid, Don Ángel Menéndez Rexach, y codirigida por el Catedrático de Derecho Administrativo de la ULPGC, Don José Suay Rincón, enmarcada en el Programa de Doctorado de la ULPGC “Islas Atlánticas: Historia, Patrimonio y Marco Jurídico institucional”, coordinado por el profesor Don Santiago de Luxán Meléndez.
En la defensa de la tesis estuvieron presentes los catedráticos Don Ángel Menéndez y Don José Suay, además de los miembros del Tribunal calificador, donde la Doctora también estuvo acompañada por sus familiares y amigos, así como por miembros del Grupo de Gobierno Insular como el Vicepresidente 2° y Consejero de Cultura y Patrimonio Histórico, Andrés Briansó, la Consejera de Educación, Empleo y Juventud, María Jesús de la Cruz, el Consejero de Bienestar Social, Víctor Alonso y el Gerente del Patronato de Turismo, Moisés Jorge Naranjo.
La tesis se centra en la peculiaridad del modelo de organización territorial del Estado Español diseñado por la Constitución de 1978 entre el propio Estado, las Comunidades Autónomas y las Entidades locales que, partiendo de un Estado unitario, se inspira en los principios e instituciones del Estado Federal, que conjuga autogobierno con gobierno compartido y reconoce, además, una serie de singularidades culturales, geográficas, lingüísticas, institucionales o fiscales.
Sin embargo, lo interesante es que se apoya en un pilar fundamental que preside las relaciones entre los distintos entes y que, a la vez, se reivindica como requisito de legitimidad para el ejercicio del ámbito de poder político. Ese pilar o principio es el de autonomía, entendido como autogobierno, considerando a dichas entidades locales como componentes esenciales e indispensable para asegurar los principios constitucionales. Lo curioso, defiende la Doctora, “es que la Constitución no garantiza un contenido concreto de autonomía, sino la preservación de una Institución en términos reconocibles para la imagen que de la misma tiene la conciencia social en cada tiempo y lugar. A partir de aquí todas las opciones políticas son posibles”.
En el ámbito territorial de Canarias, la isla se configura además como un componente esencial de la organización territorial de la propia Comunidad Autónoma, presentando a los Cabildos como una Institución compleja. Por un lado, como órgano de gobierno, administración y representación de la isla y, por otro, “y aquí está la novedad, como Instituciones de la Comunidad Autónoma”. Esta circunstancia demanda soluciones diferentes de las que se han puesto en práctica hasta ahora y de las que puedan articularse para las administraciones públicas en el resto del territorio estatal, “poniendo nuevamente sobre la mesa el debate isla-región, y trae hasta nuestros días el viejo pleito insular, cuestionando el papel que en el reparto inicial de poder desempeñan los distintos entes territoriales”.