Un total
de 36 establecimientos majoreros ya cuentan con este
distintivo que concede el Ministerio de Turismo
1 de
julio de 2016
El
consejero de Turismo del Cabildo de Fuerteventura, Blas Acosta,
visitó, ayer jueves, la casa rural La Morisca, en Tuineje,
después de que este negocio haya sido reconocido con el sello
del Sistema Integral de Calidad Turística en Destinos (Sicted)
que concede la Secretaría de Estado del Ministerio de Turismo.
La Casa
Rural La Morisca fue distinguida, junto a 12 establecimientos
majoreros más, con este sello el pasado mes de junio. Esta
distinción está homologada por la Unión Europea y avala que
estos lugares tienen unos servicios mínimos en toda España.
Blas Acosta
felicitó a los propietarios de la vivienda, el matrimonio
formado por Carmelo García e Inma Ramírez, y les animó a seguir
trabajando para “entre todos conseguir un destino de primera
calidad”.
Según
Acosta, “Fuerteventura es, en estos momentos, líder en la
llegada de turistas y eso nos obliga a todos, instituciones y
empresarios, a trabajar conjuntamente y a estar a la altura de
lo que demandan los miles de visitantes que recibimos cada mes”.
El también
vicepresidente del Cabildo reconoció que son ya 36 los
establecimientos majoreros que han sido reconocidos con este
distintivo y animó a otras empresas y administraciones a “seguir
el ejemplo de empresarios como Carmelo García e Inma Ramírez que
han apostado por la calidad y eso estoy seguro que les
repercutirá favorablemente”.
Los dueños
de La Morisca, que abrió sus puertas en 2014, son además
propietarios de la Casa Rural Teberite, en Tuineje, que también
cuenta desde el pasado febrero con este sello de calidad.
Inma
Ramírez reconoció “estar satisfecha” con este reconocimiento y
señaló que esta distinción “empieza a tener un efecto llamada en
su negocio”. Ramírez puso como ejemplo cómo ya una agencia
holandesa, tras conocer que el establecimiento cuenta con el
sello, “se ha puesto en contacto con nosotros y nos ha
contratado para las próximas temporadas”.
Las casas
rurales Teberite y La Morisca se levantan sobre las ruinas de
una antigua vivienda del siglo XVIII en Tuineje. Hace unos años,
Carmelo García e Inma Ramírez compraron la edificación con la
vista puesta en crear un espacio destinado al turismo rural.
Sus
propietarios convirtieron la antigua vivienda, formada por
dependencias familiares y de uso agrícola, en dos casas rurales
en las que han fusionado la arquitectura rústica con la moderna
con el objetivo de adaptarse a los nuevos tiempos.