Cientos de devotos acudieron esta mañana acompañados de las autoridades a la procesión de la Patrona de Fuerteventura.
A las 12:00 horas comenzó el traslado de la Imagen de la Virgen hasta la plaza, acompañada por cientos de fieles de todas partes de la isla, al igual que por las autoridades presentes como el Presidente del Cabildo Insular, Blas Acosta, el Alcalde de Betancuria y Consejero del Cabildo, Marcelino Cerdeña, así como por la Senadora Paloma Hernández, el Vicepresidente 1º de la Corporación, Alejandro Jorge, el Director Insular de la Administración del Estado, Domingo Fuentes, la Consejera de Educación, Empleo y Juventud del Cabildo, María Jesús De La Cruz, el Alcalde de Pájara, Miguel Ángel Graffigna, el diputado del PP, Fernando Enseñat, Lola García, de la oposición en el Cabildo por CC y los Comandantes de la Guardia Civil, Pedro Peinado y Antonio Milla.
A la llegada a la plaza, tuvo lugar la Solemne Eucaristía concelebrada, presidida por el Obispo de la Diócesis de Canarias, Francisco Cases. Al mismo tiempo que diferentes coros parroquiales de diferentes puntos de la isla, le tocaron y cantaron a Nuestra Patrona, seguidos por los devotos que se encontraban presentes.
Para el Obispo, en este día especial, “nos sentimos muy cerca de María. A quien le preguntamos muchas veces: ¿por qué nos ocurren ciertas cosas? Como es el caso del incendio acaecido el pasado mes en Gran Canaria. Acontecimientos que nos quitan la alegría, pero sus indicaciones son las que tenemos que seguir: Responsabilidad y solidaridad. En aquellos momentos, todos estaban haciendo lo que tenían que hacer y estaban donde tenían que estar: autoridades disponiendo fuerzas de emergencia y seguridad, bomberos replegados… Por su labor, sentimos gran emoción, cuya situación de emergencia, tocaba nuestro corazón”.
El Obispo quiso mandar un mensaje: “Sed solidarios en todo momento. La sociedad, para que sea una boda feliz y donde no falte el vino, hay que escuchar más lo que dice Jesús, ahí encontrarán la alegría”.
A la finalización de la Eucaristía con rezos y cantos a la Virgen, ésta fue nuevamente trasladada a su hornacina.
La Patrona de Fuerteventura enlaza así con el origen de nuestro pueblo y hoy, en pleno siglo XXI, su culto conserva toda la vigencia que ha mantenido durante los últimos 303 años de celebraciones en honor de la Peña en el santuario de Vega de Río Palmas. Así, aunque ha transcurrido más de medio siglo y han evolucionado las costumbres y usos sociales, la esencia de estas fiestas de devoción y diversión, al igual que de punto de encuentro insular y de peregrinación, permanece.