Hay un fuerte vínculo entre el yacimiento arqueológico del islote de Lobos
con la ciudad de Cádiz, a finales del siglo I a.C., en el momento en el que era
uno de los puertos más importantes de la época romana. Así planteó hoy, martes,
día 4 de julio, Darío Bernal Casasola, profesor de Arqueología de la
Universidad de Cádiz, la vinculación entre los vestigios localizados en los
trabajos arqueológicos que, desde hace cinco años, se llevan a cabo en Lobos
con el Imperio romano.
Bernal Casasola realizó estas declaraciones durante la
visita que se realizó a las excavaciones que han iniciado su cuarta campaña
gracias a un acuerdo entre los cabildos de Fuerteventura, a través de la
Consejería de Patrimonio Histórico, que dirige Juan Jiménez, y Tenerife, la
Universidad de La Laguna y el Museo de la Naturaleza y el Hombre.
"La forma de las ánforas y el tipo de pasta utilizada sabemos que
proceden de talleres romanos de la bahía de Cádiz", dijo Bernal Casasola,
que calificó de "muy importantes" los trabajos de excavación para los
estudios de arqueología de la producción en la época antigua. "Aquí hubo
un taller de púrpura y un lugar de explotación de recursos marinos, lo cual denota
la habitual frecuentación en esta parte del Archipiélago por parte de los
romanos", añadió. "Es un lugar importante que disipa cualquier duda
sobre el contacto de Canarias con el ámbito peninsular dentro del Mare Nostrum
y del comercio romano", apostilló este investigador.
Por su parte, Carmen del Arco, catedrática de Prehistoria de la Universidad
de La Laguna, manifestó que en esta cuarta campaña de excavación arqueológica
en Lobos "hemos abierto un espacio que se configura en un espacio de
especialización de trabajo con la púrpura, junto a un espacio doméstico con
abundantes restos alimenticios que se consumían, fundamentalmente ganado
caprino, y material cerámico romano. No se descarta que también haya habido
explotaciones de pescado, junto a la de púrpura".
Del Arco aseguró que "extraían la púrpura, la procesaban en calderos
de plomo pero aún desconocemos el proceso de salida y cómo salía al exterior".
"La gente que trabajó aquí fueron operarios especializados. La vajilla
localizada es de tipo gaditana. Es decir, los barcos, en el ir y venir, recalaban
en Cádiz y se surtían de este material", dijo la experta.
El presidente del Cabildo de Fuerteventura, Marcial Morales, destacó que la
colaboración entre administraciones "ha permitido seguir descubriendo y
poniendo en valor estos trabajos en Lobos, que dejan clara la presencia romana
en esta parte del mundo". Morales anunció que "estamos esperando el
momento en el que el yacimiento pueda abrirse a la población".
Estos vestigios romanos fueron descubiertos en Lobos en 2012 después de que
un turista hallara restos de cerámica sobre una montaña de jable. A partir de
ahí, se han llevado a cabo cuatro campañas arqueológicas -la última comenzó
hace unas semanas-, en las que se ha ido confirmando la presencia romana en el
islote.
Tras los primeros sondeos realizados en 2012, el yacimiento Lobos 1,
localizado en la playa de La Calera, ha ido arrojando datos que confirman la
existencia de un taller de púrpura romano El yacimiento está formado por un
núcleo principal con concheros de stramonita, molusco del que se extrae la
púrpura para más tarde usarla como tinte, además de varias estructuras
habitacionales. Durante los trabajos arqueológicos han aparecido restos de
cerámica, como ánforas de salazones y vinarias, anzuelos, vajilla variada de
mesa y de cocina, lucernas, fragmentos metálicos de hierro y bronce además de
restos óseos de cabras.