Patricia
Arroyo, mujer del paciente dependiente José Alejandro López Bastos,
pide ayuda para atender a su marido y denuncia el servicio deficiente
que prestan las empresas que ofrecen servicios de dependencia en
Fuerteventura a través de convenios con el Gobierno de Canarias.
Sus
críticas se centran especialmente en la empresa Atlanta, ya que el resto
no atendió a su solicitud, aunque asegura que la situación es similar
en todas “todo el mundo sabe lo mal que funcionan”.
Desde su propia
experiencia destaca la falta profesionalidad y titulación en algunas
trabajadoras que “ni siquiera saben tomar la tensión”. También evidencia
las dificultades para conciliar citas médicas y recibir la atención
médica que precisa su marido, y expone que la empresa factura horas
“aunque no lleve a cabo el servicio”.
Tras interponer denuncias a través
de distintos organismos, ahora se ha quedado sin servicio. El problema
es que el sistema de ayuda a la dependencia que impone el Ejecutivo
regional impide que pueda contratar los servicios a un profesional por
cuenta ajena o a otra empresa distinta sin convenio.
En esta tesitura,
pide que se ejerza mayor control a las empresas al tiempo que hace un
llamamiento a los usuarios de Fuerteventura para hacer una denuncia
conjunta que permita llegar a una solución y poner fin a esta situación.
Así, insta a las familias a ponerse en contacto con ella a través del
correo electrónico: yotambiensoydependiente@gmail.
