Según el estudio de optimización del sistema de generación de electricidad, agua potable y movilidad de Fuerteventura, llevado a cabo por la Consejería de Industria del Cabildo, en el año 2038 la Isla podría disponer de un nuevo sistema energético con una presencia de las energías renovables en el sistema eléctrico del 58,25% y un nivel total de autosuficiencia energética del 43%. La Isla estaría además muy cerca del 100% de la autonomía de agua potable.
El presidente del Cabildo de Fuerteventura, Marcial Morales, el consejero de Industria, José Juan Herrera, y el profesor de la ULPGC, Roque Calero, presentaron hoy, viernes, 4 de agosto, los resultados de este estudio, que persigue la planificación de un modelo enérgico a medio plazo que permita la máxima autonomía energética, agua y movilidad para Fuerteventura, a la vez que genere el mínimo impacto ambiental.
En el acto estuvieron presentes además la consejera de Medio Ambiente y Servicios, Natalia Évora, el consejero de Aguas, Andrés Díaz Matoso, y la consejera de Igualdad, Yanira Domínguez.
Para el desarrollo de la investigación, se tomaron en consideración los escenarios temporales de los años 2013, 2026 y 2038. En este último año se prevé que toda la planta actual debe ser renovada.
Según estos datos, en 2038 Fuerteventura podría aspirar a un nuevo sistema energético que consiga una generación de energía eléctrica un 58,25% renovable, un transporte interior un 40% renovable debido al uso de vehículos eléctricos y una disminución en un 46,55% de la dependencia de combustibles fósiles .
Fuerteventura podría tener además un ahorro de un 15% en costes de generación de energía eléctrica, un ahorro de un 50% en costes de movilidad con los coches eléctricos y un ahorro de un 46,55% en costes de combustible y emisiones de gases de efecto invernadero.
Para Roque Calero, profesor encargado de elaborar el estudio, “las conclusiones del proyecto son fantásticas. Fuerteventura puede tener otro modelo diferente al que tiene ahora, que traerá muchísimas consecuencias positivas como el ahorro energético. Unas condiciones que colocan a la Isla en la cresta de la ola de lo que va a venir”.
Según Morales, “Fuerteventura apuesta por la independencia energética, en la producción de agua y en la movilidad. Esto supone que la titularidad de esas fuentes de energía estén en su mayor parte en la Isla. Asimismo, considera necesario “apostar por la instalación de parques energéticos en diferentes zonas de la Isla, donde se concentre la producción, y revindicar además al Gobierno de Canarias que la toma de decisiones sobre el sistema eléctrico de la comunidad autónoma se tomen en Canarias”.
Por su parte, Herrera mostró su satisfacción por los resultados obtenidos. “Una vez elaborado el estudio técnico, es el turno de poner sobre la mesa y exponer al Gobierno de Canarias cual es el modelo que queremos seguir”, señaló. El consejero destacó además, el papel que desempeñan las instituciones en esta materia. “Desde el Cabildo estamos trabajando en ello, y casi todos nuestros edificios se abastecen ya de energías renovables”, añadió.
Este modelo alternativo de 2038 indica que la Isla tendría un sistema energético con una producción de electricidad de 677 Gwh/año. Este sistema consumiría 113.700 toneladas de combustibles cada año, con un coste de 68 millones de euros y una emisión de gases de efecto invernadero de 389.636 toneladas al año.
Según los datos presentados, en el año 2013 el 97% de la energía consumida en Fuerteventura procedía del petróleo y sólo el 3% de recursos renovables. El consumo de combustible total se elevó a 336.700 tep (toneladas equivalentes de petróleo) con un coste aproximado de 201 millones de euros y un impacto medioambiental de 1.200.000 toneladas de gases de efecto invernadero. Unas cifras muy diferentes a los datos estimados para 2038.
“Como puede observarse se trata de una situación claramente insostenible que requiere la confección de un nuevo modelo energético para la isla de Fuerteventura. Hay que tener en cuenta que estos datos que pueden ser mayores, ya que se basan en la tecnología aplicable hoy en día. Esto irá evolucionando en el futuro y posiblemente la tecnología aumentará esta penetración en las energías renovables”, añadió Herrera.
Datos del 2013
En 2013 el sistema de generación de energía eléctrica de la Isla estaba compuesto por un parque térmico de 187 MW de potencia bruta (159 MW neta), parques eólicos con una potencia total instalada de 13 MW y 3,5 MW de instalaciones solares fotovoltaicas. La producción total de electricidad se elevó a 589,51 GWh/año de energía eléctrica puesta en red, de las cuales sólo el 6,7% era de origen renovable, con un coste de generación de 21 €/kWh. El consumo de combustible se elevó a 132.930 toneladas. Un 11% de la electricidad se destinó a la producción de 16 hm3 de agua desalada con la que se abastece la casi totalidad de la isla.
El sistema hidráulico de la isla estaba compuesto por una serie de plantas desaladoras públicas y privadas con una capacidad total de 72.578 m3/día
El sistema de movilidad estaba compuesto por una flota de 74.572 vehículos con un consumo total de 61.000 toneladas de combustibles cada año.
