Fuerteventura.- Las personas cuidadoras “son la prolongación de las manos de las enfermeras en el domicilio” y asumen la labor casi sin darse cuenta y sin recibir una formación adecuada que les haga más llevadera la responsabilidad adquirida.
Así lo explica la enfermera gestora de casos, Fefi Gil, quien impartió ayer el taller sobre “Cómo saber si estás cuidando y cuidas bien” en el marco del programa “Saber cuidarse para poder cuidar”.
Las participantes, la inmensa mayoría mujeres (a razón de 14 a 3), son personas con una inmensa fortaleza que construyen para hacer frente a la adversidad.
Es el caso de Adriana Martínez, con un hijo esquizofrénico de 30 años a su cargo, un menor de 13 y pendiente de iniciar tratamiento para vencer a un incipiente vde pecho.
Una situación que hizo tambalear las paredes de su existencia hasta que, gracias a distitnos servicios como este programa, ha conseguido, confiesa, “aceptar mi realidad” y vivir el día a día de la mejor manera posible. Adriana está agradecida por tener la oportunidad de participar en esta iniciativa y poder, no solo aprender, sino también compartir.
