La Molina de Tefía luce nuevas aspas, que mantienen su estructura y diseño original, tras la reconstrucción realizada a raíz del colapso sufrido por tres de estas estructuras el pasado 28 de diciembre, como consecuencia de los fuertes vientos que se registraron en la isla durante el paso de la DANA que azotó al Archipiélago a finales del año pasado.
Al proceder el Área de Obras y Maquinarias del Cabildo a su retirada para la reparación, el Servicio de Patrimonio Cultural detectó cómo las otras tres aspas también se encontraban dañadas, por lo que el Taller de Carpintería del Cabildo de Fuerteventura, dependiente del Área de Infraestructuras, Obras y Maquinarias, decidió reemplazar las seis.
El presidente del Cabildo, Sergio Lloret, presenció ayer, martes 14 de marzo, durante el inicio de las obras de recolocación de las aspas, que han concluido hoy. “Como Institución Insular tenemos un compromiso con la conservación y mantenimiento de la herencia histórica de Fuerteventura, que es bien de todos los majoreros y tiene que seguir perdurando para las generaciones futuras”, destacó el regidor insular.
Un análisis de la arquitecta técnica, Patricia Molina, quien realizó la Memoria Valorativa de la reparación de la Molina de Tefía, dio como conclusión la necesaria sustitución de las seis aspas en su totalidad, debido al nivel de deterioro que presentaban los largueros de las mismas y con el fin de preservar el buen estado de la estructura, que forma parte del Patrimonio Histórico y Cultural de la isla majorera.
Estos largueros están constituidos por una pieza sólida que se acopla en la galleta central de giro y a las cuales se adiciona el resto de las estructuras de madera de cada aspa, motivo por el cual es necesaria su sustitución íntegra con el fin de restablecer el sistema estructural de la Molina.
Para que la sustitución de las aspas sea óptima, se han tenido que realizar varios pasos previos al inicio de las obras. Primero los carpinteros del Cabildo elaboraron las tres aspas que fueron derrumbadas por el viento y las otras tres que se encontraban en mal estado.
Luego, los empleados de la Unidad de Obra tuvieron que formarse en la especialidad de trabajos en altura y manejo de plataforma elevadora para poder proceder a la instalación de las aspas. Y, además, se tuvo que tramitar un contrato menor de alquiler de brazo elevador ya que la Institución Insular no cuenta con este tipo de maquinaria necesaria para la colocación de las aspas.
Recordamos que la Molina de Tefía, adquirida por el Cabildo de Fuerteventura en el año 1992, es uno de los 23 molinos de la isla declarados Bien de Interés Cultural (BIC) en reconocimiento a su carácter histórico y patrimonial que rememora el pasado agrícola de la zona durante los últimos siglos.