Rosa Bella
Cabrera subraya que la repercusión de las instalaciones agropecuarias en la economía
a través de su reconocimiento y explotación como actividades turísticas
complementarias se presenta como capital en la labor de impulso del sector
primario del archipiélago
Canarias, 17 de febrero de 2016.- El pleno del Parlamento de Canarias
aprobó este miércoles por unanimidad la proposición no de ley del PSOE por la
que pide al Gobierno canario que promueva la
inclusión de manera expresa de las instalaciones agropecuarias susceptibles de
visita turística en la Ley de Ordenación del Turismo de Canarias, modificada
por la Ley de medidas tributarias, administrativas y sociales de Canarias, en
el apartado relativo a las actividades turísticas complementarias.
En la defensa de la
iniciativa, la portavoz de Turismo del PSOE, Rosa Bella Cabrera, afirmó que en
este inicio de un nuevo
ciclo económico, “es imprescindible que exista una mayor complicidad entre los
elementos que componen nuestro sistema productivo para definirlo entre todos”.
Recordó que Canarias recibe más de 12 millones de visitantes al año, por lo que
el sector primario tiene en el turismo "un filón que debe aprovechar” y
resulta “irrenunciable” concebirlo como “vertebrador de la economía canaria”.
Para la diputada socialista, la agricultura, la ganadería y la pesca deben ser percibidas también como actividades productivas a integrar en el turismo en su doble vertiente: productos y procesos, “sobre todo teniendo en cuenta la necesidad de fomentar alianzas estratégicas entre los operadores de los distintos sectores, que contribuirán a mejorar el volumen de la oferta existente, normalmente insuficiente para satisfacer la creciente demanda del turismo”.
Cabrera abogó por potenciar la creación de nuevos productos turísticos y/o desarrollar los ya existentes, ligados al sector primario, como pueden ser las rutas del queso, los molinos de gofio o las industrias transformadoras, entre otros. “Nuestros productos son un atractivo turístico, no sólo por su calidad, sino por su excepcionalidad, por lo que debemos convertirlos en una oportunidad para quienes nos visitan, esforzándonos en que ambos sectores trabajen conjuntamente”.
En su intervención, insistió en que debe
reconocerse legalmente lo que es una práctica habitual en distintos destinos:
la revalorización turística de las instalaciones agropecuarias, diversificando
su actividad principal y poniendo en valor sus producciones a través de la
apertura turística de sus explotaciones, de manera que se presenten al
visitante como un producto con valor añadido.
“La repercusión de las instalaciones
agropecuarias en la economía a través de su reconocimiento y explotación como
actividades turísticas complementarias se presenta como capital en la labor de
impulso del sector primario del archipiélago”, reiteró.