Marcial Morales Reclama para Fuerteventura la equiparación a la media de Canarias ''los deficitarios medios
con los que aún cuenta la atención sanitaria en la isla''
Apuesta por un modelo de desarrollo sostenible ''que no pasa por la
cantidad sino por el cuidado del paisaje y el bienestar de la población''
Por unanimidad, con 52 votos a favor de los 52 emitidos, el
Parlamento de Canarias aprobó hoy, 17 de julio de 2018, la toma en
consideración de la proposición de ley de Grandes Poblaciones. El presidente
del Cabildo de Fuerteventura, Marcial Morales, pedía a la Cámara regional que
así lo hiciera, para su posterior aprobación en los próximos meses, una vez
culmine el pertinente trámite parlamentario.
Acordada por práctica unanimidad también el pasado mes de
abril en el pleno insular, la consideración de la isla como gran población
supondrá, en palabras de Morales, un paso más ''hacia la nueva estructura y el
nuevo régimen organizativo del gobierno insular que demanda la Fuerteventura de
estas primeras décadas del siglo XXI''.
Tras recordar que la cifra oficial de habitantes a
finales de diciembre de 2017 -110.299 residentes, de los cuales un 67% son
nacidos fuera de ella- les permite acogerse a este título, Morales destacó que
la población se ha duplicado en menos de dos décadas, que el territorio y la
sociedad majorera están ''cargados de potencialidades'' y que atraviesan ''un
momento de importantes transformaciones''. Unos retos para los que se requiere
una administración insular moderna, que haga ''del fomento de la participación
ciudadana uno de los contenidos fundamentales de la nueva gobernanza''.
Morales rememoró asimismo cómo la Ley de Cabildos aprobada
en 2015 recoge la necesidad de llevar a cabo una transformación de las
administraciones públicas para que se adapten a las demandas sociales, y para
que mejoren la eficacia, calidad y eficiencia de un sector público que debe
trabajar atento y conectado con las necesidades de la ciudadanía. En este
contexto, que Fuerteventura sea considerada como gran población permitiría ''impulsar
la consecución de las demandas colectivas de la sociedad majorera y gestionar
sus problemas y oportunidades''.
Durante su intervención, Morales destacó que ''3.300.000 de
turistas anuales representan una envidiable base sobre la que consolidar una
economía que –fundándose en el conocimiento, la diversificación y una cada vez
más estrecha relación entre los sectores económicos- aproveche la formación que
han alcanzado miles de jóvenes; resuelva las graves dificultades de acceso a la
vivienda que sufren muchas familias (primer problema por encima del problema del
empleo, pues la carencia de vivienda en muchos casos les impide aceptar ofertas
de trabajo) y supere determinados desajustes que sigue presentando nuestra
estructura de empleo (con 8.000 personas paradas mientras algunos sectores se
quejan de la dificultad, cuando no imposibilidad de encontrar personal
cualificado)''.
''Todo ello –continuó- dentro de una apuesta por la
sostenibilidad, conscientes de que Fuerteventura va encontrando el modelo de
desarrollo que garantice el bienestar de su gente. Un modelo que nunca pasará
por la cantidad –que nos convertiría en un destino turístico mediocre,
reduciendo la calidad de vida de nuestra población- sino por el cuidado y
puesta en valor de una tierra y un paisaje singularmente atractivos. Pasará, en
definitiva, por que Fuerteventura se parezca, cada vez más, a sí misma''.
El presidente de la Corporación argumentó cómo, a día de
hoy, Fuerteventura ''se ha ido dotando de equipamientos para ofrecer
alternativas culturales, de formación y empleo a su población. Ejemplo de ello
es el Parque Tecnológico –donde se desarrollan programas de la importancia del
Open Island o el Geo Innovation 2030-, la Red de Espacios Escénicos o la
próxima puesta en marcha de la Escuela de Arte y Diseño''. Y fue muy crítico al
exigir que se equiparen a la media de Canarias ''los deficitarios medios con
los que aún cuenta la atención sanitaria en la isla''.
Morales reconoció la actual y eficaz colaboración con los
seis ayuntamientos de la isla, ''a los que la institución insular ha venido
apoyando desde hace décadas con la prestación de servicios'' en beneficio de
toda la isla, ''a los que se suma un potente programa inversor –soportado, en
buena parte, por el Fondo de Desarrollo de Canarias- en formación y empleo,
energías renovables, embellecimiento, asfaltado de caminos, infraestructuras
deportivas, sociosanitarias y turísticas, zonas comerciales abiertas, transporte
o seguridad y emergencias''. Como muestra, citó la petición de todos los
municipios para que sus planes, programas y proyectos fueran tramitados por los
órganos ambientales insulares creados tras la entrada en vigor de la Ley del Suelo,
''claro ejemplo de esa cooperación que haciendo economía de escala (insular) estamos y tenemos clara voluntad de
continuar desplegando''.
Por último, apeló a esa unión institucional y social que tan
bien ha demostrado su eficacia en cuestiones ligadas a la defensa del
territorio y el rechazo a las energías contaminantes. ''Cuando ha sido
necesario, Cabildo y ayuntamientos, movilizando a la sociedad insular, hemos
conseguido poner en su sitio, lejos de Fuerteventura, a quienes, con el
petróleo primero, con las torretas después, pretenden imponernos modelos
extraños a lo que la mayoría queremos para nuestra isla'', concluyó.