La Consejería de Medio Ambiente
del Cabildo de Fuerteventura tiene previsto liberar tres tortugas Caretta caretta el sábado 21 de marzo
(11.30 horas, playa de Cofete, junto al cementerio). Los animales nacieron en
Fuerteventura, en la misma playa de Cofete, dentro el programa de estudio para
la reintroducción de tortugas, desarrollado bajo la coordinación de la ULPGC.
Estas tres tortugas proceden además de un nido cuyos ejemplares nacieron más
débiles, debido a las condiciones de temperatura. Actualmente pesan entre 4 y
7'5 kilos.
El departamento de Educación
Ambiental invita a asistir a esta suelta a todas la personas interesadas. Se
realizará una breve charla sobre las características de estos animales y la importancia
de contribuir a conservar limpio el mar.
La tortuga caretta (tortuga boba) es una especie cosmopolita que
se distribuye por todos los océanos y mares tropicales y subtropicales, en un
área muy extensa. Se encuentra en aguas de las plataformas continentales,
bahías, lagunas y estuarios, y en ocasiones hasta en el interior de puertos.
Es una especie considerada en peligro
de extinción según los criterios de la Unión Mundial para la Naturaleza. La
principal amenaza es la pesca y la contaminación marina, puesto que es relativamente
frecuente encontrar ejemplares enredados en mallas, plásticos o residuos, que
les impide alimentarse con normalidad y les puede llevar a la muerte.
La Consejería de Medio Ambiente
del Cabildo de Fuerteventura cuida actualmente ocho de estas tortugas, que
durante los últimos meses han sido localizadas enfermas o accidentadas en distintos puntos de la
geografía insular. Una vez recuperadas son progresivamente devueltas al mar.
De manera general, en caso de
avistar una tortuga flotando en el mar se debe comprobar si está
descansando o tiene problemas (lo indican síntomas como sequedad en su
caparazón, algas incrustadas, heridas…).
La colaboración ciudadana es un
factor fundamental en el rescate y atención de las tortugas marinas y
otros animales que aparecen accidentados en las aguas y costas de la Isla.
Llegado el caso de manipular al ejemplar, no se le debe coger por el caparazón
y, para moverlo, hacerlo siempre hacia delante. Hay que tener cuidado con su
pico, uñas y aletas (en caso de mordedura, no tirar hasta que abra la boca).
Una vez atendida, se debe dejar a la tortuga en un lugar fresco y
preferentemente húmedo (con paños o toallas húmedas), y no darle de comer ni de
beber hasta que el personal técnico llegue y recoja al animal. Para su
transporte, se aconseja una caja de plástico acorde al tamaño del animal.
La principal recomendación en
caso de avistar un animal accidentado, marino o de otro tipo, es siempre
contactar con los servicios medioambientales del Cabildo, si es en horario de
oficina con la Consejería de Medio Ambiente (928 - 53 34 27 / 928 – 86 11 15),
a cualquier hora del día con la Centralita de la institución (928 – 86 23 00 /
22) o, en cualquier caso, directamente con el teléfono de guardia de los
agentes de Medio Ambiente (626 982 371). También existe la posibilidad de
llamar al 112.