Fuerteventura.- El alcalde en funciones de Puerto del Rosario, Nicolás Gutiérrez, cederá mañana el bastón de mando al que será, previsiblemente, el nuevo regidor, el socialista Juan Jiménez. Y lo hará “orgulloso de haber sido alcalde de mi pueblo” y convencido de que su gestión al frente del Ayuntamiento capitalino durante los últimos cuatro años se valorará mejor “cuando se analice con el paso del tiempo”.
Así ha mostrado su satisfacción por haber logrado resolver, con su equipo de gobierno, varias “papas calientes” como el Centro Comercial de Las Rotondas que, finalmente, no se derribará y que, reflexiona, “hubiera supuesto la bancarrota del Ayuntamiento”; la aprobación definitiva del PGOU, la guagua urbana, la puesta a disposición del suelo para los edificios judiciales o el paseo marítimo hasta playa blanca.
Hoy mismo ha firmado el convenio para ingresar en las arcas municipales los dos millones que, procedentes del Gobierno de Canarias, se destinarán a su ejecución.
En su último día como alcalde, ha presidido el izado de las banderas azules que ondearán en el municipio. En total, tres de las cuatro insignias que ha conseguido Fuerteventura y que significan, entre otras actuaciones complementarias en otros arenales, la apuesta por poner en valor el litoral.
Nicolás Gutiérrez se despide “feliz y con nostalgia” de todo el personal de la administración local y con “la sensación del deber cumplido”. Confiesa que le queda un sabor agridulce por no haber recibido el respaldo de sus compañeros de partido que le ha tratado, afirma, con “falta de respeto” tras haber sido “marcado” por mostrar sus discrepancias con la directiva.
