Parlamento Canarias apoya por unanimidad la iniciativa para que las islas no capitalinas puedan contar con áreas de Zonas Francas

img/b/R29vZ2xl/AVvXsEi5M1DaZT-z-5ebhjDfA2YsR_yG45Ixcl4Z-duqb3N6Aav79UUguMQnr_6ysHGZLglvZMUV3K1NMoFACOd2RLpO3CnaYDdKAUYHVuAkD_B3nPdu-mF-g7R90thn3knXi_fBwLVoypxqKBLa/s640/130416_Foto_Mario_Pleno_1.jpg



Hasta el momento sólo funcionan en Gran Canaria y Tenerife


13 de abril de 2016

El Parlamento de Canarias aprobó hoy por unanimidad una iniciativa del Grupo Nacionalista Canario dirigida a encomendar al Gobierno de Canarias la tarea de estudiar con las instituciones de las islas no capitalinas y sus agentes sociales y económicos la posibilidad de poner en marcha en dichas islas las denominadas Zonas Francas, entendidas como áreas de fiscalidad reducida delimitadas en el entorno de los respectivos puertos, y orientadas a incentivar el comercio internacional. 

“Hasta el momento sólo Gran Canaria y Tenerife cuentan con estos recintos, pese a que su origen está en los Puertos Francos del siglo XIX que sí se autorizaron para todas las islas del Archipiélago”, recordó el diputado majorero Mario Cabrera, quien expuso la Proposición No de Ley elaborada conjuntamente con Nereida Calero y Lola García.

El Pleno del Parlamento de Canarias del pasado 25 de noviembre de 2015 ya aprobó una Proposición No de Ley presentada por el Grupo Popular, dirigida a que tanto el Gobierno de Canarias como el Gobierno de España desarrollen determinadas acciones y gestiones para promocionar las ventajas derivadas de la Zonas Francas de Gran Canaria y Tenerife, en coordinación con las respectivas áreas ZEC.

Lo que se plantea ahora con la PNL del Grupo Nacionalista Canario, “es que el mismo esfuerzo que el Parlamento de Canarias encomendó al Gobierno de Canarias en noviembre pasado que hiciera para potenciar la zonas francas de Gran Canaria y Tenerife, que ahora lo haga para al menos estudiar la posibilidad o el interés que podría existir para promover la creación de las zonas francas en las islas no capitalinas, porque se trata de ofrecer idénticas posibilidades de desarrollo a todas la islas, aunque lógicamente con distintas dimensiones y características”, señaló el diputado del Grupo Nacionalista Canario por Fuerteventura, Mario Cabrera.

Todas las islas no capitalinas han ido desarrollando durante estos años las áreas de la Zona Especial Canaria. “Algunas, como antes decía, han tramitado también sus Puestos de Control Fronterizo y los servicios de frontera Schengen en sus puertos. El siguiente paso es que al menos se estudie y plantee la posibilidad de habilitar zonas francas, previa consulta con los agentes locales y las instituciones insulares previamente por si existiera interés real en estas herramientas”, explicó.

Antecedentes históricos

Mario Cabrera recordó que la creación de las actuales Zonas Francas en Gran Canaria y Tenerife, en 1998 y 2006, está relacionada con el objetivo de potenciar actividades de comercio exterior, para lo que se ofrecen determinadas ventajas que se estima que pueden resultar muy atractivas.

La Comisión Europea también ha otorgado a las Zonas Francas Canarias una serie de particularidades que no tienen la mayoría de estas áreas ubicadas en la UE. Las empresas instaladas en las Zonas Francas Canarias pueden acogerse también a los beneficios que el REF ofrece, así como a la mayor flexibilidad para la entrada de mercancías de países terceros.

La puesta en marcha de la Zona Franca de Gran Canaria en 1998 y de la Zona Franca de Tenerife en 2006, se inspiran en la figura de los antiguos Puertos Francos Canarios, creados a través de un Real Decreto 1852, dotados ya con rango de Ley desde 1870 y ampliado su contenido con un nuevo Real Decreto en 1900.

A lo largo del siglo XX los Puertos Francos Canarios fueron objeto de sucesivas actualizaciones, hasta que el proceso de adhesión de España a las Comunidades Europeas acabó conduciendo a la desaparición de los Puertos Francos.

La creación por tanto de las Zonas Francas de Gran Canaria y Tenerife vino, en cierta forma, a recuperar esta herramienta con tres siglos de historia en las Islas”, recordó Mario Cabrera.

Retomando por lo tanto los antecedentes, cabe señalar que el Real Decreto original de 1852, en su artículo 1, recoge:
Se declararán puertos francos en las Islas Canarias los de Santa Cruz de Tenerife, Orotava, Ciudad del Real de Las Palmas, Santa Cruz de La Palma, Arrecife de Lanzarote, Puerto de Cabras y San Sebastián”. Y por Ley de 22 de junio de 1870 se extendió la declaración al puerto de Valverde, en El Hierro.


Lo que buscamos con esta iniciativa es plantear la oportunidad y posibilidad de extender los posibles beneficios derivados de las Zonas Francas a todas las islas del Archipiélago. Por supuesto que el momento histórico es otro, que las infraestructuras son otras y que hasta los requisitos administrativos y aduaneros son también distintos. En el siglo XIX cuando nacen los Puertos Francos, los muelles de las islas no capitalinas podían comerciar con países del extranjero. Hoy, en pleno siglo XXI, ya no pueden y hasta tienen que recurrir a trámites de décadas para aspirar a configurarse como Frontera Schegen y Puestos de Inspección Fronteriza. Y no todos, ya que hasta el momento sólo han optado a ello Lanzarote, La Palma y Fuerteventura…”, concluyó el diputado majorero.