El
grupo Podemos en el Cabildo de Fuerteventura se ha mostrado favorable a la
declaración institucional del Cabildo con la que se ha paralizado un trazado de
la línea de alta tensión, no obstante, la formación morada lo entiende como una
“pírrica victoria” y califica de “sorprendentes” las “medallas” que se han puesto por ello
tanto el presidente del Cabildo como el alcalde de Pájara, “cuando son sus
políticas, con la complicidad del Gobierno de Canarias, las que han permitido a
Red Eléctrica campar a sus anchas por el paisaje majorero”, explica el
consejero Gustavo García. “Como guinda el gobierno Canarias ha recurrido un
auto judicial en contra de la demanda e intereses del cabildo”, subraya.
Podemos,
en la línea de asociaciones como Plataforma por un Nuevo Modelo Energético o
Fuerteventura Sostenible, se ha mostrado contrario desde el principio a la
instalación de esta línea.
“Nuestra
postura va mucho más allá de una pequeña discrepancia de trazado en uno de los
tramos, el nuevo tendido de alta tensión supone abrir una cicatriz innecesaria
en el paisaje majorero, es un atentado paisajístico y medioambiental que viene
a perpetuar un modelo de energía caduco, y es, además, una estafa, porque la Ley
marca la preferencia a hacerlo por terrenos públicos pero lo evitan para no
pagar impuestos, prefiriendo las expropiaciones intimidatorias con vecinos y
vecinas desprotegidas”, denuncia el consejero.
Por
eso, Podemos critica que el propio Marcial Morales haya propuesto que el Cabildo
asumiera los costes de soterramiento de un tramo de la línea. “Es decir, con el
dinero de todos los majoreros y majoreras, sin siquiera evaluar la envergadura
de la actuación, ni su coste y para beneficio de un gigante del Ibex35, cuando
no es de su competencia. El coste de soterramiento puede llegar ser del orden
de 8 a 10 veces superior a la opción aérea y la obra nada tiene que ver con el suministro
eléctrico de la población majorera, para lo cual se seguirá utilizando la red
antigua de 66 kV”, explica García.
La
nueva línea de 132 kV, que discurriría desde Mácher (Lanzarote) y Matas Blancas
(Fuerteventura) ha sido segmentada en cinco tramos, tratándose a cada uno de
ellos como un proyecto independiente, algo que al parecer, entra en colisión
con la normativa comunitaria, siendo este, uno de los argumentos esgrimidos por
el Cabildo para la paralización de la red. Sin embargo, la formación morada
cuestiona que el presidente Marcial Morales, hubiera actuado con el mismo celo en
el caso de haberse aceptado su opción de soterramiento en ciertos tramos. “Seguramente
se hubiera seguido adelante con la línea, obviándose que la división del
trazado en cinco tramos, tratando a cada uno de ellos como un proyecto
independiente supone ir en contra con lo establecido por la UE”, señala García.
Cabe
mencionar que las asociaciones han repetido en múltiples ocasiones que la red
antigua cubre con solvencia las necesidades de la isla, más aún cuando la
demanda no ha hecho más que bajar, gracias al aumento del autoconsumo por medio
de energías renovables y la adopción de medidas de eficiencia energética.
Según
el consejero, el presidente del Cabildo entra en contradicciones cuando el 1 de
abril del año pasado, declaraba en una noticia de la web de la propia
institución que el pretendido nuevo tendido de 132 kV dará garantía a la red de
transporte eléctrico de Fuerteventura, y permitirá una mejor penetración desde
cualquier punto a cualquier punto de las energías renovables. “Ahora parece que
al fin ha entendido, que todo esto está garantizado con la línea de 66 kV”,
sentencia García.