Prana Fuerteventura ha abierto sus puertas para ofrecer no solo masajes con cita previa sino también clases de yoga y pilates “el alma del centro” como explica Sara Antonely.
Se recupera, a pesar del protocolo establecido, ”la energía que surge en las clases de forma presencial” y que no ha desaparecido durante el confinamiento.
Un tiempo en el que las impulsoras del centro han apostado por ayudar a la comunidad ofreciendo talleres gratuitos en distintos ámbitos y recibiendo un intensa respuesta.
Tal es asi, que sin pretenderlo, han logrado una buena publicidad y también ingresos que, de forma voluntaria, han percibido de los participantes en distintas sesiones.
Giulia y Sara no tienen palabras para agradecer la respuesta de la gente aunque saben el secreto de actuar con positivimo “y desde el corazón”.