La
UNED pone en marcha el proyecto BECOMA (Batería de Evaluación de la
Competencia Matemática),
un curso de 30 horas y un test que permitirán a familias, profesores y
escuelas detectar las capacidades matemáticas de los estudiantes de 5º
de Primaria.
Esta
prueba permite conocer la competencia del niño o niña en matemáticas y
hace posible que
el profesor personalice el aprendizaje estableciendo contenidos
ajustados a cada alumno. La aplicación de Becoma, en consecuencia,
facilita que el alumno mantenga el interés por las matemáticas evitando
el rechazo por conceptos y tareas demasiado difíciles
o demasiado fáciles. La aplicación sistemática de métodos de
aprendizaje personalizado permitiría mejorar los niveles de rendimiento
alcanzados por nuestro país en el informe PISA y superar el promedio de
los países de la OCDE. Adicionalmente los datos obtenidos
permiten evaluar posibles casos de niñas y niños con altas capacidades y
ajustar el método de enseñanza y los contenidos a una formación acorde
con su óptimo rendimiento. Durante los próximos meses ambas opciones
serán de
acceso
libre y gratuito a través de la web de la UNED
BECOMA nació de la tesis doctoral de
Ramón García Perales,
dirigida por la catedrática de Pedagogía Diferencial de la UNED y experta en tratamiento de niños con altas capacidades,
Carmen Jiménez,
que obtuvo una nota de sobresaliente cum laude. García, profesor
especializado en orientación educativa en Secundaria y actualmente
profesor de Pedagogía en la UCLM (Universidad de Castilla la Mancha),
detectó que en el estudio de fortalezas de los
niños y niñas de 5º de primaria había hasta un 3,7 por ciento que
obtenían los niveles de rendimiento más altos en competencia matemática,
lo que permitía ubicarlos en la categoría de niños con altas
capacidades. Sin embargo los datos de MECD únicamente recogían
un 0,24 por ciento. “Nuestra intención es detectar el resto de niños de
altas capacidades y ofrecerles unos ejercicios que les estimulen, que
no les aburran y que les permitan desarrollar todo su potencial”,
explica el profesor García.
Frente
a ese objetivo, el proyecto se plantea adecuar también los niveles de
enseñanza y exigencia
para los alumnos con menor rendimiento, de forma que no se les presione
tanto que se desesperen ante las dificultades o rechacen la asignatura;
ni tan poco que no consigan acercarse siguiera a su umbral de
aprendizaje y se aburran o desmotiven.
Herramienta de profesor
BECOMA
considera las capacidades en cuatro ámbitos: aritmética, geometría,
estadística y probabilidad,
y magnitudes y proporcionalidad. Además, tanto el curso como los test,
incluyen fórmulas de evaluación, listados de ejercicios y sugerencias
adaptados a los distintos niveles de la tabla de resultados. Una fórmula
que permite a los profesores aplicar las
tareas adecuadas a las capacidades de cada alumno o grupo de alumnas y
alumnos. Pero, ¿cómo motivar a los docentes para que incorporen este
tipo de formación personalizada en unas aulas que, en la mayoría de los
casos, superan ampliamente los 30 niños?
“El
sistema educativo español, siguiendo las propuestas de la OCDE,
promueve la enseñanza personalizada.
Se trata de ofrecer a cada niño y niña el nivel que le permita alcanzar
la excelencia en su formación. A mayor capacidad, mayor nivel de
exigencia y mayor cantidad de materia, y esto ya desde bien pequeños”,
señala
Sixto Jansa,
director de la Oficina de Transferencia del Conocimiento, (OTRI) de la
UNED, departamento que se ocupa de difundir y conseguir la financiación
para este tipo de proyectos.
Contando
con este objetivo, BECOMA interesa a los centros educativos para
mejorar el aprendizaje
y el rendimiento de los alumnos en las pruebas externas; sirve a los
maestros como herramienta de trabajo y para adquirir méritos en el
baremo profesional y en su
curriculum.
Herramienta de padres
Una
de las características más versátiles de BECOMA es la posibilidad de
plantear las preguntas
y ejercicios individualmente o en conjunto, sin restricción de número.
Puede hacerse a un solo niño, si se intuye que podría estar dotado de
altas capacidades, lo que se conoce como
superdotado, o bien a toda una clase, si se quiere averiguar el nivel medio o los extremos del alumnado.
El acceso libre y gratuito a BECOMA durante los próximos meses
–inicialmente hasta julio, tanto para el curso como para los test-, permite
que los padres aprovechen también esta oportunidad de evaluar las capacidades matemáticas de sus hijas e hijos.
La ejecución
rigurosa de los ejercicios, la lectura no complaciente de los
resultados
y la interpretación ajustada de los baremos indicará si nuestro hijo o
hija necesita refuerzos en matemáticas; si está en el nivel adecuado
para su edad o si estamos educando a pequeños genios. Una magnífica
herramienta para tomar decisiones al respecto.